A 50 años del asesinato de Víctor Jara 

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Miembros del Ejército, procesados y condenados, torturaron y acribillaron al cantautor popular. Su cuerpo, con 44 balazos, fue hallado junto al cadáver de Littré Quiroga, jefe del Servicio de Prisiones durante el Gobierno de la Unidad Popular. “La pobreza de mi propio país, de América Latina y de otros países del mundo. He visto la huella del horror de una matanza de judíos en Varsovia, el pánico de la Bomba, el golpe mortal causado por la guerra que desintegra al hombre y todo lo que de él surge y nace” dijo el compositor en 1966 en entrevista a El Siglo.

“El Siglo”. Santiago. 15/9/2023. El 16 de septiembre se cumplen cincuenta años del brutal asesinato de Víctor Jara. A días del golpe de Estado, los agentes de la recientemente instalada dictadura asesinaron al artista después de mantenerlo detenido en el Estado Chile y someterlo a varias golpizas y torturas. Su cuerpo fue encontrado en un sitio eriazo en la comuna de Lo Espejo, afuera del Cementerio Metropolitano, junto al cuerpo de Littré Quiroga, quien fuera el jefe del Servicio de Prisiones durante el Gobierno de la Unidad Popular. El lugar fue declarado Monumento Histórico.

El 11 de septiembre de 1973 Víctor Jara tenía 40 años, estaba casado con Joan Turner y tenía dos hijas, Manuela y Amanda. El día de la asonada militar se despidió de su familia y partió rumbo a la Universidad Técnica del Estado (UTE), actual USACH, donde participaría en una actividad político-cultural a la que asistiría el Presidente Salvador Allende (ahí el mandatario anunciaría la realización de un plebiscito para dirimir la situación del país). El acto no se pudo efectuar, se produjo el ataque y bombardeo a La Moneda y el cantautor decidió quedarse en la UTE junto a otros artistas, estudiantes, profesores y estudiantes para resistir el embate golpista. Al día siguiente la sede fue asediada por militares quienes se llevaron detenidos a unas seiscientas personas, entre ellas, Víctor Jara. De ahí fueron llevados al Estadio Chile donde fue golpeado y torturado.

El 15 de septiembre, según relatan testigos, Jara fue llevado a los camarines del recinto, ahí a punta de golpes, culatazos y pisoteadas le quebraron sus manos y lo obligaron a tocar la guitarra. Uno de sus torturadores y asesinos fue Edwin Dimter Bianchi, conocido como El Príncipe, quien le gritó “¡Cantante marxista, comunista conchadetumadre, cantor de mierda”, antes de empezar a jugar a la ruleta rusa hasta dar muerte al cantautor. 

Cincuenta años después la Corte Suprema condenó a siete militares en retiro a penas de hasta 25 años de prisión por el secuestro y asesinato del cantautor Víctor Jara. Entre ellos fueron condenados los exoficiales del Ejército Raúl Jofré, Edwin Dimter, Nelson Haase, Ernesto Bethke, Juan Jara y Hernán Chacón (se suicidó cuando fueron a detenerlo), todos con edades entre 73 y 85 años. Otro de los implicados es Pedro Barrientos, quien está requerido de extradición desde Estados Unidos. La Corte Federal de Florida lo declaró en junio de 2016 responsable del asesinato de Jara, por lo que ordenó el pago de 28 millones de dólares en compensación a su familia. Barrientos dirigió las torturas contra el compositor y su asesinato. 

Se comprobó que el cantautor fue brutalmente torturado y recibió 44 balazos. “Se le aplicaron torturas físicas, siendo los golpes más severos aquellos que recibió en la región de su rostro y en sus manos”, según la investigación del juez Miguel Vázquez. Su cuerpo fue encontrado por habitantes de la Población Santa Olga en la actual Comuna de Lo Espejo.

Víctor Jara

Víctor Lidio Jara Martínez nació el 28 de septiembre de 1932 en la localidad de La Quiriquina, comuna de San Ignacio, en la región de Ñuble. Era hijo de un inquilino y una cantora popular. Su padre los abandonó, por lo se trasladó junto a su madre a una cité en la población Los Nogales en Estación Central. A los 15 años quedó huérfano e ingresó en el Seminario Redentorista de San Bernardo. Dos años después, salió e ingresó a la Escuela de Teatro de la Universidad de Chile e ingresó al grupo Cuncumén donde conoció a Violeta Parra, quien lo acogió como discípulo. 

En 1960 recibió el título de director teatral y pasó a formar parte del directorio del Instituto del Teatro de dicha casa de estudios. Dirigió varias obras de teatro y obtuvo el Premio Laurel de Oro como mejor director del año. En 1967 fue invitado a Gran Bretaña, donde recibió otro premio por su dirección teatral. Estando allí compuso una de sus canciones más conocidas, “Te recuerdo Amanda”, dedicada a sus padres Amanda Martínez y Manuel Jara.

En una entrevista con el diario El Siglo, el 18 de septiembre de 1966, el músico señaló que “cada vez me conmueve más lo que sucede a mi alrededor. La pobreza de mi propio país, de América Latina y de otros países del mundo. He visto la huella del horror de una matanza de judíos en Varsovia, el pánico de la Bomba, el golpe mortal causado por la guerra que desintegra al hombre y todo lo que de él surge y nace. En fin, tantos otros desastres que cansa enumerar. Pero también he visto lo que el amor puede hacer, lo que la verdadera libertad puede hacer, lo que la fuerza y el poderío del hombre feliz pueden hacer”.

En 1968 pasó a ser el director artístico del conjunto de música popular Quilapayún. En 1967 publicó su primer álbum musical, titulado Víctor Jara. Su segundo álbum, “Pongo en tus manos abiertas” (1969), coincidió con el respaldo que prestó a la candidatura de la Unidad Popular de Salvador Allende, siendo el cantautor militante de las Juventudes Comunistas. En 1970 publicó “Canto libre”, “El derecho de vivir en paz” y “La población”, creaciones de gran belleza y fuerza poética que lo convirtieron en uno de los máximos exponentes del resurgimiento y la innovación de la canción popular en Latinoamérica.

En 1969 obtuvo el triunfo en el Primer Festival de la Nueva Canción Chilena, con su composición “Plegaria a un labrador”, que interpretó acompañado del conjunto Quilapayún. 

En 1971 ingresó al cuerpo de artistas estables de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad Técnica del Estado. 

En 1971 y en medio de una de las giras que hizo como embajador cultural de la Unidad Popular, Víctor Jara actuó en México, hecho que quedó registrado en un disco bautizado, simplemente, “En México” 1971. En este mismo contexto, un año después Jara viajó a Cuba, país con el que sentía una especial afinidad con motivo del proceso revolucionario liderado por Fidel Castro. Tocó para diversos públicos en distintas ciudades (aunque el registro fue editado recién en 2001). Jara fue particularmente pródigo en el diálogo con el público cubano, lo que explica el título del álbum “Habla y canta-En Cuba” 1972.

La dimensión de Víctor Jara es mundial, ya que no solo ha sido interpretado y homenajeado por músicos chilenos. Algunas de las bandas y músicos que han rendido tributo al virtuoso chilenos son: U2, The Clash, Los Fabulosos Cadillacs, Joan Manuel Serrat, Roger Waters, Rage Against the Machine, Bruce Springsteen, Ska-p, James Dean Bradfield, entre otros.