Vistazo a la contingencia

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La Cuenta Pública y la gira a Canadá y Estados Unidos, fueron dos momentos que incidieron positivamente en la imagen y subida de aprobación del Presidente Gabriel Boric, así como en mostrar capacidades del Gobierno. Sin embargo, es evidente que la contingencia tiende a comerse la agenda más permanente, con sucesos difíciles de no dejar en la primera fila. Se constataron avances sólidos en todo lo relacionado con la concreción del texto de la nueva Constitución y los esfuerzos para que la ciudadanía se informe y acceda a una información veraz y precisa. Lo más negativo presentado en la coyuntura es la situación de la economía, con proyecciones de aumento de la inflación, baja en el crecimiento y persistencia de alza de los precios, con impacto en las familias chilenas.

Equipo “El Siglo”. Santiago. 17/06/2022. 1.- Nadie desmintió que la Cuenta Pública del Presidente Gabriel Boric tuvo un efecto positivo en la agenda, al plantear temas de fondo y proyección del trabajo gubernamental, y reafirmar el camino de reformas estructurales y transformadoras que, en definitiva, apuntan a las necesidades y demandas de amplios sectores de la población. Fueron planteamientos claros y no evasivos. Luego vino el viaje a Canadá y Estados Unidos, donde el mandatario expuso varios puntos de vista y propuestas a escala internacional y regional, fue parte del impulso a medidas en torno del medioambiente y cambio climático, hizo ver la necesidad de no exclusiones en encuentros como la Cumbre de las Américas -donde participó-, y reiteró el compromiso con la defensa de los derechos humanos sin exclusión de casos. Hubo una evaluación general positiva de su desempeño en la segunda gira internacional. Así, la Cuenta y la gira incidieron positivamente en la imagen y la evaluación presidencial. Esto provocó un alza en los niveles de aprobación, posicionó mejor al Gobierno en la coyuntura y abrió una perspectiva de capacidades y respuestas del Ejecutivo. Lo dicho por el Presidente Boric apuntó a redoblar certezas y a reafirmar y clarificar la hoja de ruta trazada.

2.- Sin embargo, es evidente que la contingencia tiende a comerse la agenda más permanente, con sucesos difíciles de no dejar en la primera fila. Los nuevos y dramáticos hechos delictivos, empezando por el asesinato de un carabinero, la continuidad de atentados graves en La Araucanía y episodios como la tardanza en el actuar policial y militar en un caso de ataque que era reportado; las controversias en torno de declaraciones y decisiones desde la cartera de Salud (acusaciones de malas prácticas en Hospital Psiquiátrico en Valparaíso y adelanto y prolongación de vacaciones de invierno en escuelas), las malas noticias en cuanto a continuidad de la inflación y el efecto en el costo de la vida de la gente, cuestionamientos al plan de “no más armas”; fragmentación del voto del oficialismo a la hora de aprobar en el Parlamento la prolongación del Estado de Excepción en La Araucanía, el abogado que se queda dormido y no presenta la querella por caso de carabinero asesinado, son ejemplos que grafican la persistencia de dinámicas contingentes que se sobreponen a procesos y trabajos del Gobierno en distintas áreas, sobre todo sociales. De allí que pareciera que junto a la gestión, un esfuerzo de las y los ministros y otras autoridades, debería apuntar a reforzar más y mejor la agenda permanente, darle mayor presencialidad y potencia, y no desencadenar más episodios contingentes que, por lo demás, ya son suficientes. En esa línea, al cierre de esta nota se evaluaba positivamente la entrevista realizada por la vocera de La Moneda, Camila Vallejo, al Presidente Gabriel Boric, donde se reponen temas, se hacen balances, se habla de los planes gubernamentales, sin dejar de hacer referencia a temas contingentes.

3.- Como es de suponer, la labor de la Convención Constitucional y las adecuaciones y avances en el nuevo texto constitucional están sobre la mesa, donde se ha hecho un enorme esfuerzo por dar a conocer y explicar los verdaderos contenidos frente a una evidente campaña de mentiras y desinformación. Lo explicado e informado apunta a la profundidad y alcance de los trabajos en este proceso constituyente que llega con profundos logros a su etapa final. El desafío más grande, y que está vinculado a motivar el Apruebo en el plebiscito de salida del 4 de septiembre, es hacer carne en la gente el contenido de la nueva Constitución, que se valore la labor de la Convención, y que haya disposición de la ciudadanía a informarse y comprender el nuevo texto. Junto a eso, desactivar las campañas tendenciosas basadas en la mentira, la distorsión, la desinformación y las caricaturas, de manera eficaz y extensa; ya no bastan los diagnósticos sobre las pretensiones de los sectores conservadores y contra-transformadores, sino que hay que efectuar acciones concretas como salir a terreno, caminar los territorios, difundir los contenidos, promover el nuevo texto, explicarle a la gente, responder a las inquietudes, desarrollar metodologías de difusión. Pero,  como en el caso de la agenda del Gobierno, aquí también entra el ruido de episodios puntuales de contingencia que son relevados por los medios de prensa y actores políticos y de opinión, como la negativa inicial de invitar a la y los ex presidentes a la ceremonia de entrega de la nueva Constitución, y desacuerdos entre convencionales de izquierda y progresistas. También la insistencia de querer instalar una “tercera vía” o aquello de “aprobar para reformar”, quitando piso a la labor de la Convención y desalentando respecto a los contenidos del nuevo texto constitucional.

4.- En la coyuntura el tema económico gravita tanto con fuerza como negativamente. Las informaciones y proyecciones de subida de la inflación (podría llegar a un 13%), baja en el crecimiento de la economía (Este año estaría en el orden del 1.5% o 2.25% y el 2023 podría ser menor a un 1%, con mayor contracción y la sombra de una recesión), y el impacto del alza de tasas de interés decretada en Estados Unidos con negativo efecto hacia la región dada, por ejemplo, con la elevación del dólar, son factores nada buenos en el escenario. Junto a eso, persiste el alza de precios de productos básicos, de alimentos, de la bencina, que tiene a la gente sintiendo el aumento del costo de la vida, por cierto, sin una realmente eficaz mejora de los sueldos, pese al salario mínimo en 400 mil pesos. Hay impactos como el encarecimiento de los arriendos, de los pagos en escuelas y universidades, en transporte, que le llega a las familias de trabajadores, de segmentos pobres y de clase media. Todo apunta a que la economía y su impacto social, es una materia que tendrá que ocupar centralmente al Gobierno.