El secretario general de la ONU indicó que los países miembros de esa instancia han sacado a cientos de millones de personas de la pobreza y advirtió que “el mundo le está fallando a los países en desarrollo”. El Presidente de Cuba apuntó que “la Humanidad ha alcanzado un potencial científico-técnico, inimaginable hace un par de décadas, con una capacidad extraordinaria para generar riqueza y bienestar”. Añadió que “muchas de nuestras naciones son llamadas pobres, cuando en realidad deberían considerarse naciones empobrecidas. Y es preciso revertir esa condición”. El jefe de Estado de Brasil, en tanto, declaró que “avances como la computación, la inteligencia artificial, la biotecnología y la digitalización traen posibilidades que no nos imaginábamos”. “Una vez más uno ve al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional aplicando las lógicas ortodoxas que nos llevaron a este estado de crisis, y una distribución de la pobreza en millones de seres humanos de este mundo”, sostuvo el mandatario de Argentina. Presidente de la Unión de las Comoras señaló que la Unión Africana elaboró la estrategia para el decenio en materia de ciencia, tecnología e innovación y “estamos determinados a hacer de este marco una herramienta eficiente que oriente los esfuerzos e inversiones”. “Nosotros como pueblos del sur debemos buscar nuestros caminos y no aceptar dictados de ninguna potencia con pretensiones coloniales o de dominación”, enfatizó el Presidente de Venezuela. El jefe de Gobierno de Angola expuso que “sabremos encontrar las soluciones y estrategias que nos conducirán a la concreción de nuestra agenda de desarrollo”.
“Prensa Latina”. “Cubadebate”. La Habana. 9/2023. Hace casi 60 años un grupo de naciones se reunieron para firmar el documento fundacional del G77, y los fundadores se declararon unidos en su determinación de remediar “siglos de injusticia y abandono”, expresó António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas (NU), al intervenir en la primera jornada de la Cumbre del Grupo de los 77 y China en La Habana, Cuba.
Guterres señaló que en el convulso mundo actual esta función sigue siendo tan importante como entonces y sus miembros son el motor del desarrollo sostenible.
Añadió que en las últimas décadas los países del G77 y China han sacado a cientos de millones de personas de la pobreza y se han aunado en las Naciones Unidas en la búsqueda de soluciones globales y de solidaridad, sin embargo, ahora, se ven enredados en una maraña de crisis mundiales.
El secretario general de la ONU significó que la pobreza va en aumento y el hambre es cada vez mayor; los precios están disparados; la deuda es exorbitante; los desastres climáticos son cada vez más frecuentes; los sistemas y los marcos mundiales les han fallado. “La conclusión es clara, señaló, el mundo le está fallando a los países en desarrollo”, reconoció.
Puntualizó que para cambiar esto, necesitan una acción nacional para garantizar la buena gobernanza, movilizar recursos y priorizar el desarrollo sostenible; se requiere una acción global, que respete la propiedad nacional, para construir un sistema internacional que defienda los derechos humanos y funcione en beneficio de sus intereses.
Lo anterior, resaltó, requiere que el G77 y China use su voz para luchar por un mundo que funcione para todos.
Comentó que la tarea comienza con el propio sistema multilateral, avanzamos hacia un mundo multipolar que crea nuevas oportunidades de liderazgo en el escenario global, pero por si solo no garantiza ni la paz ni la justicia.
Subrayó que para ello se requieren instituciones multilaterales fuertes y eficaces, pero muchas de las instituciones globales actuales -particularmente el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y las instituciones de Bretton Woods- reflejan una era pasada.
Guterres explicó que ha propuesto medidas para hacer que la arquitectura financiera global sea más representativa y receptiva a las necesidades de las economías en desarrollo.
La Cumbre de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la próxima semana y la Cumbre del Futuro del próximo año son oportunidades reales de avanzar. “Les agradezco su firme apoyo a nuestras propuestas y cuento con su continuo respaldo”, apuntó.
En cuanto al tema de la cita que los reúne expresó que “la ciencia, la tecnología y la innovación pueden forjar solidaridad, resolver problemas comunes y ayudar a hacer realidad los ODS, sin embargo, hoy en día, con frecuencia exacerban las desigualdades y afianzan las divisiones”.
Manifestó que los países más ricos acapararon vacunas contra la Covid-19 mientras la pandemia se extendía desenfrenadamente en el Sur Global; los africanos pagan tres veces el promedio mundial por los datos, mientras que los titanes de la tecnología acumulan una riqueza inimaginable.
El secretario general de la ONU aprovechó la ocasión para felicitar a Cuba por el exitoso desarrollo de sus vacunas contra la Covid-19, que no solamente han servido al pueblo cubano, sino que ayudaron a otros pueblos víctimas de la desigualdad y el acceso internacional a las vacunas.
Solo una acción global puede abordar estas desigualdades, asegurar una transición justa hacia una economía digital y garantizar que en una nueva era tecnológica nadie se quede atrás. “Nuestro Pacto Digital Mundial propuesto puede lograrlo exactamente”, sentenció.
Díaz-Canel
Párrafos destacados del discurso del Presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel:
“Enfrentamos también, los colosales desafíos que son consecuencia del injusto orden internacional vigente; pero no somos los únicos. Hace casi 60 años fue la comunión de dificultades y la esperanza de que juntos podríamos enfrentarlos y vencerlos, lo que nos hizo nacer como grupo. ¡Somos los 77 y China! ¡Y somos más!”
“El Grupo de los 77 y China tiene la inmensa responsabilidad de representar en la escena internacional los intereses de la mayoría de las naciones del planeta. Por razones históricas e identitarias conservamos el nombre original, pero somos más, muchos más que 77 países. Hoy somos 134, lo que equivale a más de las dos terceras partes de los Estados miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), donde vive el 80 % de la población mundial”.
“Esta Cumbre ocurre en momentos en que la Humanidad ha alcanzado un potencial científico-técnico, inimaginable hace un par de décadas, con una capacidad extraordinaria para generar riqueza y bienestar que, en condiciones de mayor igualdad, equidad y justicia, podría asegurar niveles de vida dignos, confortables y sostenibles para casi todos los pobladores del planeta”.
“Son los pueblos del Sur los que más padecen pobreza, hambre, miseria, muertes por enfermedades curables, analfabetismo, desplazamientos humanos y otras consecuencias del subdesarrollo. Muchas de nuestras naciones son llamadas pobres, cuando en realidad deberían considerarse naciones empobrecidas. Y es preciso revertir esa condición en que nos sumieron siglos de dependencia colonial y neocolonial, porque no es justo y porque no soporta ya el Sur el peso muerto de todas las desgracias”.
“Hemos propuesto como tema de esta Cumbre el papel de la ciencia, la tecnología y la innovación, como componentes esenciales del debate político asociado al desarrollo. Lo hacemos convencidos de que los logros y avances en ese campo son los que dirán a la postre si es posible y cuándo alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible relacionados con el fin de la pobreza; el hambre cero en el mundo; la salud y el bienestar; la educación de calidad; la igualdad de género; el agua limpia y el saneamiento; la solución a los problemas de la energía, el trabajo, el crecimiento económico, la industrialización y la justicia social.Tengo la más absoluta convicción de que tampoco será posible avanzar hacia un modo de vida sostenible, en armonía con las condiciones naturales que garantizan la vida en el plantea, sin esas premisas. Y es obvio que el proceso transformador hacia el logro de esos objetivos contempla, de una forma u otra, el papel del conocimiento como generador de ciencia, tecnología e innovación”.
“Estamos ante la mayor revolución científico-técnica que ha conocido la humanidad. La ciencia ha modificado el curso mismo de la vida. El ser humano ha sido capaz de conocer el espacio sideral e ingeniar sofisticadas máquinas que automatizan hasta los procesos más elementales asociados a su existencia”.
“En el Sur más de 84 millones de niños permanezcan sin escolarizar y más de 600 millones de personas sin electricidad; que solo el 36 % de la población utilice Internet en los países menos adelantados y en las naciones en desarrollo sin litoral, frente al 92 % con acceso en los países desarrollados”.
“La privatización del conocimiento pone límites a la circulación y recombinación del mismo. Plantea limitaciones al progreso y las soluciones científicas de los problemas. Constituye una barrera significativa para el desarrollo y el papel que en él deben desempeñar la ciencia, la tecnología y la innovación. Agrava las condiciones socioeconómicas en los países en desarrollo”.
“Baste señalar que en medio de la mayor pandemia que ha conocido la humanidad, solo diez fabricantes concentraron el 70 % de la producción de vacunas contra la Covid-19. La pandemia evidenció con crudo realismo el costo de la exclusión científica y digital, que cobró vidas y amplió las distancias entre el Norte y el Sur. Como resultado, los países en desarrollo solo llegaron a disponer de 24 dosis de vacunas por cada 100 habitantes, mientras los más ricos disponían de casi 150 dosis por cada 100 personas.Ante el llamado a multiplicar la solidaridad y apartar las desavenencias, el mundo terminó siendo absurdamente más egoísta”.
“El gasto mundial en investigación y desarrollo, entre 2014 y 2018 aumentó un 19,2 %, superando el ritmo de crecimiento de la economía mundial del 14,6 %. Sin embargo, continúa altamente concentrado, pues el 93 % lo aportan los países integrantes del G20”.
“Los recursos necesarios para la solución de fondo a estos problemas existen. Solo en 2022, el gasto militar mundial alcanzó la cifra récord de 2,24 billones, o sea, millones de millones de dólares. ¿Cuánto pudiera hacerse con esos recursos en beneficio del Sur? Estimaciones realizadas indican que el 9 % del gasto militar mundial podría financiar en diez años la adaptación al cambio climático, y el 7 % sería suficiente para cubrir el gasto de vacunación universal contra la pandemia”.
Lula Da Silva
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, inició la tercera y última jornada de la Cumbre del G77 y China en La Habana.
“Cuba ha sido defensora de una gobernanza global más justa”, significó el presidente brasileño. Expresó que la isla es, además, víctima de un bloqueo económico ilegal, al tiempo que condenó la inclusión en la lista de países patrocinadores del terrorismo.
“Desde que asumí el nuevo mandato -dijo- he participado en diferentes foros como la Celac, los Brics, entre otros, pero ninguno cuenta con la diversidad del G-77”.
Lula señaló que el grupo fue fundamental para defender la construcción de un nuevo orden económico internacional, pero “infelizmente, muchas de las demandas no fueron atendidas”.
Señaló que “avances como la computación, la inteligencia artificial, la biotecnología y la digitalización traen posibilidades que no nos imaginábamos”. “Sin embargo, las grandes multinacionales en el sector de la tecnología poseen modelos de negocios que acentúan la concentración de riquezas, sostuvo.
“Un pacto global digital ofrece la oportunidad de mitigar desafíos y permitir que los beneficios de las nuevas tecnologías puedan ser aprovechadas por todos”, acentuó el mandatario brasileño. Enfatizó que la idea de establecer un panel científico para la inteligencia artificial va dirigido a asegurar la participación de especialistas del mundo y del movimiento.
Apuntó que la emergencia climática nos impone nuevos imperativos. Señaló que el financiamiento climático debe ser asegurado a todos los países del movimiento según sus necesidades y prioridades.
“La declaración que adoptamos –dijo- prevé una amplia agenda de cooperación científica, unido con el conocimiento de las comunidades”.
Apuntó que en Brasil se confiere carácter especial a la cooperación científico tecnológica entre países del movimiento dentro de la política externa, asimismo, se dará un nuevo impulso a programas y proyectos regionales.
Alberto Fernández
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, citó las palabras del presidente de República Dominicana al enfatizar que “no son tiempos de cambio son cambios de época” y lo calificó como “una gran definición para poder entender lo que nos está pasando”.
“La globalización poco a poco fue fracasando y si uno mira hoy el presente se da cuenta de que estamos viviendo un cambio de época”, aseguró Fernández, quien además destacó los últimos episodios vividos en el mundo actual, como lo es la crisis en Europa, la guerra de Rusia y Ucrania, la aparición de dos potencias enormes como China e India, entre otros.
Exhortó a cambiar el sistema internacional que definitivamente sigue trabajando y operando con las mismas lógicas.
“Una vez más -dijo- uno ve al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional aplicando las lógicas ortodoxas que nos llevaron a este estado de crisis, a este estado de concentración del ingreso en unos pocos, y una distribución de la pobreza en millones de seres humanos de este mundo”.
“Cuánto tiempo más vamos a soportar esto?”, cuestionó. “Eso hay que terminarlo de una vez y para siempre (…) y nosotros acá desde el sur global tenemos en este momento una enorme herramienta, porque en el sur global está aquello que el mundo central está necesitando. ¿Qué necesita el mundo central? Necesita alimentos; necesitan energía; necesitan del litio”.
Condenó el bloqueo económico, financiero y comercial impuesto por Estados Unidos a Cuba.
“Lo verdaderamente caro no es la ciencia, sino la ignorancia. Seamos dueños de nuestro futuro. Unamos nuestros votos y busquemos los cambios necesarios. Soñemos todos juntos para transformar esta realidad. ¿Qué pasaría si el Sur se levantara y dijera ¡Basta! a tanta injusticia?, desarrollado la vacuna contra la Covid-19. En absoluta soledad y con mucho esfuerzo”, señaló.
“Como afirmó Fidel Castro, las grandes obras las diseñan los ingenieros, pero las llevan adelante los soñadores. Persigamos un mundo más justo e igualitario”, añadió.
“Todo lo que estoy diciendo –enfatizó- podemos hacerlo. Y creo que como este es un cambio de época. Tenemos que hacernos dueños de nuestro futuro. Para manejar este presente y cambiar el futuro para que nos sirva. Para que nos sirva a nosotros”.
Azali Assoumani
Con la intervención de Azali Assoumani, presidente de la Unión de las Comoras y a cargo de la presidencia pro tempore de la Unión Africana, inició el debate general de la Cumbre del G77 y China.
Assoumani agradeció la hospitalidad y las condiciones de trabajo creadas para garantizar la Cumbre. Precisó que la gestión de la pandemia fue un periodo de aprendizaje en cuanto al papel de la tecnología y el espíritu de innovación para la continuidad de nuestras acciones.
“La innovación –dijo- constituye en la actualidad una parte fundamental en la solución a nuestros desafíos en materia de desarrollo”.
El mandatario señaló que el cónclave de La Habana debería recordar, una vez más, la necesidad de la solidaridad internacional eficaz y exhortó a la Cumbre a definir un mecanismo concreto que permita que aquellos que no tienen acceso a la revolución tecnológica puedan hacerlo.
Recordó que hay efectos adversos que tienen consecuencias devastadoras y mencionó el delito cibernético, la necesidad de ser más agudos con la inteligencia artificial, el ciberespacio y la manipulación genética, por lo que se precisa protección a escala mundial en los planos jurídico y operativo.
La Unión Africana elaboró la estrategia para el decenio en materia de ciencia, tecnología e innovación y “estamos determinados a hacer de este marco una herramienta eficiente que oriente los esfuerzos e inversiones”, destacó.
Nicolás Maduro
Con un saludo al general de Ejército, Raúl Castro Ruz, y “al pueblo siempre heroico de Cuba”, inició su discurso el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros. “Volamos muchas horas para venir a compartir con nuestra familia”, dijo el mandatario.
El Presidente venezolano transmitió un saludo al pueblo cubano y señaló que el G77 y China se reúne en el epicentro de los pueblos de América Latina y el Caribe: la Cuba revolucionaria. Destacó que el G77 es una gran familia de los pueblos del sur que está próxima a sus 60 años y deseó a Uganda éxitos en la realización de la venidera Cumbre del Sur.
“Estamos 60 años después marcando la pauta de lo que debe ser un modelo que permita el diálogo y la inclusión. Nosotros como pueblos del sur debemos buscar nuestros caminos y no aceptar dictados de ninguna potencia con pretensiones coloniales o de dominación”, sostuvo.
“El XXI debe ser nuestro siglo”, dijo Maduro, al tiempo que promovió potenciar una cooperación práctica de mayor nivel aplicada al conocimiento, la tecnología, la salud, la agricultura y la producción de alimentos, al desarrollo de la industria, a las telecomunicaciones.
Refirió que el G77 y China debe impulsar una poderosa iniciativa global en Naciones Unidas para que cesen las medidas coercitivas unilaterales contra los pueblos del mundo y abogar por el levantamiento del bloqueo contra Cuba, resaltando las medidas coercitivas aplicadas contra Venezuela.
Agradeció la invitación y destacó que Cuba y el G77 y China puede contar con el apoyo militante y activo de Venezuela en las grandes causas de este siglo XXI, que es el siglo de los pueblos del sur.
Angola
El Presidente de Angola, João Lourenço, al intervenir en el debate, agradeció al pueblo cubano por la hospitalidad con que fueron recibidos a su llegada a la histórica ciudad de La Habana, y también felicitó al Gobierno de Cuba por haber sido escogido para presidir el G77 y China, hecho “que me impulsa a expresarle nuestro apoyo, con la convicción de que todos juntos contribuiremos de manera significativa al fortalecimiento de la organización”.
Reiteró el firme compromiso de su país de trabajar con Cuba y con los otros Estados miembros para fortalecer la unidad y la solidaridad del Grupo, con el propósito de alcanzar los objetivos de defensa colectiva de sus intereses, y de que promuevan una agenda de desarrollo común en el contexto internacional.
Esta Cumbre, subrayó, tiene lugar en un contexto internacional de elevada complejidad política, económica y social, y de desigualdades entre las naciones.
Al respecto, señaló que el agravamiento de las tensiones y conflictos geopolíticos, la aplicación de las medidas o iniciativas unilaterales de coacción, el aumento exponencial de la pobreza extrema, el peso creciente de la deuda externa y la fragilidad de los sistemas de salud y educación, la inseguridad alimentaria y energética, la volatilidad de los mercados, y la brecha digital que se expresa por la grave dificultad del acceso a Internet, así como los efectos adversos del cambio climático y la degradación ambiental, entre otros, constituyen serios obstáculos al progreso de nuestras poblaciones, representando una amenaza creciente a la estabilidad de nuestros Estados.
Ante innumerables desafíos, aseguró el mandatario angolano, los países en desarrollo no quedarán de brazos cruzados a la espera de soluciones milagrosas para los problemas que enfrentan; al contrario, aseveró, “sabremos encontrar las soluciones y estrategias que nos conducirán a la concreción de nuestra agenda de desarrollo”.
Raúl Castro
El líder de la Revolución Cubana, General de Ejército Raúl Castro, sostuvo encuentros bilaterales con mandatarios y funcionarios de organismos internacionales, que asistieron a la Cumbre del G77 y China.
Se reunió en el Palacio de Convenciones, sede del evento, con los presidentes de Laos, Thongloun Sisoulith, y de Mongolia, Ukhnaagiin Khürelsükh. También conversó con la canciller mexicana, Alicia Bárcena.
Según informó la Presidencia de la República en la red social X, antes Twitter, Raúl Castro mantuvo un encuentro con el secretario general de la Organización de Naciones Unidas, António Guterres, quien intervino en la sesión inaugural de la cumbre.