Otra “antidemocrática maniobra destituyente” de la ultraderecha

Compartir

El rechazo a la idea de censura a la Mesa de la Cámara Baja promovida por el Partido Republicano. También se había planteado destituir y censurar al ministro Álvaro Elizalde. La presidenta de la Cámara de Diputadas y Diputados, Karol Cariola, llamó a la oposición, “a aquellos que realmente tienen un valor por la democracia y por las instituciones, a que jueguen un rol de darle seriedad y resguardo al Congreso Nacional, y en este caso a la Cámara”.

“El Siglo”. Valparaíso. 17/4/2024. Se podía esperar que la extrema derecha y algunos segmentos de la derecha no tardaran en buscar la manera de echar abajo la elección de la diputada Karol Cariola, militante del Partido Comunista, como presidenta de la Cámara de Diputadas y Diputados.

Y a unas 24 horas de la democrática elección de Cariola, el Partido Republicano (PR) apareció con la presentación de una censura a la Mesa de la Cámara Baja, que incluye a los vicepresidentes Gaspar Rivas (Independiente-Partido de la Gente) y Eric Aedo (Democracia Cristiana).

El objetivo es, en definitiva, sacar a Karol Cariola de la presidencia de la Cámara e intentar poner a alguien de la oposición. Claro que no es porque ella haya actuado de tal o cual manera. El golpe viene por declaraciones de Gaspar Rivas.

El diputado dijo en entrevista en Canal 13 que el ministro de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), Álvaro Elizalde, “a través de la subsecretaria” (Macarena Lobos) y declaró que “entendiendo que el gobierno, el oficialismo, tenía ofrecida una primera vicepresidencia al PDG…en el nuevo acuerdo se consideraba una primera vicepresidencia para el PDG, yo manifesté -al ofrecérseme-, el fin de semana, dije OK, estoy disponible”. Sin embargo, Gaspar Rivas salió a aclarar sus dichos e indicó que “en ningún caso ha habido un ofrecimiento de parte del ministro Elizalde, ya que no se puede crear, inventar u ofrecer lo que ya está contenido en un acuerdo”. Precisó que “mi labor se limitó simplemente a consultarle a la subsecretaria si aquello seguía vigente. Ella me señaló que aquello lo veían las bancadas, pero que ella entendía que la voluntad de dichas bancadas era mantener ese acuerdo de una vicepresidencia”.

Tanto en el oficialismo como en sectores de la oposición se consideró que quedaba claro lo del nuevo vicepresidente de la Cámara y que en ningún caso constituía una situación para censurar a toda la directiva de la instancia legislativa.

Pero diputados Republicano y del Partido Social Cristiano insistieron bajo el supuesto de una “intromisión inaceptable” del Ejecutivo en una decisión del Poder Legislativo. En un comunicado de legisladores del Partido Republicano se afirmó que nos parece un acto que transgrede gravemente los principios republicanos elementales, como lo son la separación y equilibrio de poderes, por ello hemos presentado formalmente la censura de la Mesa de la Cámara de Diputados”.

Frente a eso, en entrevista con Radio Cooperativa, la presidenta de la Cámara Baja, Karol Cariola, sostuvo que “hay un problema de interpretación en sus palabras (Gaspar Rivas), porque una cuestión muy clara es que la negociación de la Mesa de la Cámara la llevaron las bancadas, y siempre los diputados sostienen diálogos con el Gobierno, (ya que) la tarea de la Segpres es conversar con los parlamentarios”.

Frente a la censura que, en teoría, podría echar abajo a la directiva de la Cámara, la diputada manifestó que “me queda la impresión de que hay un sector político dentro de la Cámara, particularmente el Partido Republicano, que sabemos es de extrema derecha y su liderazgo es José Antonio Kast, muy interesado en revertir la voluntad democrática que ya se expresó en una votación hace menos de 48 horas”. Ante la acción de Republicanos indicó que “me parece lamentable que se ponga en riesgo una institución del Estado”.

Karol Cariola, en la entrevista con Radio Cooperativa, llamó a la oposición, “a aquellos que realmente tienen un valor por la democracia y por las instituciones, a que jueguen un rol de darle seriedad y resguardo al Congreso Nacional, y en este caso a la Cámara”.

El ministro Álvaro Elizalde planteó, entrevistado en 24Horas de Televisión Nacional, que “yo no soy exégeta de ningún parlamentario, no soy su intérprete. Lo cierto es que él aclaró sus dichos y los precisó. No ha habido ningún ofrecimiento de parte del gobierno”.

Precisó que “obbviamente el oficialismo, en el marco del diálogo, hizo distintas propuestas. Había firmado un acuerdo. Había propuesto que la vicepresidencia fuera ocupada por un representante del Partido de la Gente”, pero insistió en que no hubo injerencia del Gobierno en lo que decidieron las bancadas parlamentarias.

El titular de la Segpres apuntó a que “llama la atención que al día siguiente a la elección de la nueva Mesa se presente en forma inmediata una censura y la verdad es que se utiliza todo tipo de excusas”.

En esa línea, en el oficialismo se tiene la certeza de que la censura planteada desde Republicanos obedece a una estrategia de la ultraderecha para golpear al Gobierno, desestabilizar al Congreso y generar más hechos que, por ejemplo, no permitan avanzar en la Cámara Baja en proyectos de ley y en las reformas.

En ámbitos del Partido Comunista, por ejemplo, se habla de “antidemocráticas maniobras destituyentes” de la ultraderecha, que ahora apuntan a “bajar” la Mesa elegida democráticamente y antes buscaron la renuncia del ministro Álvaro Elizalde.

El asunto que la Cámara de Diputadas y Diputados, en vez de concentrarse en labores legislativas, deberá decidir sobre el voto de censura a la Mesa Directiva el próximo lunes. En el objetivo de Republicanos y el Partido Social Cristiano es, precisamente, que se apruebe y generar una vacancia de la presidencia y las vicepresidencias.

Como sea, hasta este día la iniciativa de Republicanos y socialcristianos no fructificaba y se extendía un rechazo a la censura de la Mesa legislativa, de partida por el conjunto de las bancadas parlamentarias oficialistas, pero también por una mayoría de legisladores de Renovación Nacional y la Unión Demócrata Independiente que ven inconducente la medida y, por lo demás, no creen que se reúnan los votos necesarios, lo que podría terminar en otra derrota opositora y un reforzamiento de Karol Cariola en la presidencia de la Cámara, junto a los dos vicepresidentes.