Son una genuina demostración del nuevo Chile que comenzamos a construir: pluralista, solidario, regionalista, feminista, respetuoso de nuestro patrimonio ambiental, cultural y arquitectónico, así como de nuestros pueblos originarios. Democrático y racional en la explotación de nuestros ríos, mares, lagos, bosques y montañas. También respetuoso de nuestros Derechos Sociales, Culturales y Políticos.
Miguel Lawner (*). Santiago. 07/01/2022. Octubre de 2019 volvió a dejar en claro que continúa vigente. Los movimientos ciudadanos que originaron multitudinarias manifestaciones hace dos años, eligieron antes de ayer a dos de sus genuinos representantes, para conducir a buen término las deliberaciones destinadas a darnos una nueva Carta Magna,
Durante el proceso eleccionario, fueron inútiles y casi grotescas, las tentativas de quienes nos gobernaron desde el fin de la dictadura hasta ahora, por restituir los consensos, hoy elegantemente llamados: gobernabilidad.
Las elecciones de la odontóloga María Elisa Quinteros, 39 años, elegida Presidenta de la Convención Constitucional y del médico Gaspar Domínguez, 32 años, electo Vicepresidente, son una genuina demostración del nuevo Chile que comenzamos a construir: pluralista, solidario, regionalista, feminista, respetuoso de nuestro patrimonio ambiental, cultural y arquitectónico, así como de nuestros pueblos originarios. Democrático y racional en la explotación de nuestros ríos, mares, lagos, bosques y montañas. También respetuoso de nuestros Derechos Sociales, Culturales y Políticos.
Tanto María Elisa como Gaspar son originarios de provincia y allí prestan sus servicios profesionales. Han convivido con las carencias que afectan a millones de compatriotas. Jamás podrían invocar, como lo manifestó el ex ministro de Salud, Mañalich, su ignorancia respecto a los niveles de hacinamiento existentes en nuestro país.
María Elisa trabajó durante ocho años en el Servicio de Salud Municipal de Hualañé y más tarde realizó varios diplomados en Salud Pública, Gestión Sindical y Salud Ocupacional. Una profesional de lujo, al servicio de las demandas de tantas familias modestas, humilladas diariamente en nuestros centros hospitalarios.
Gaspar Domínguez. 32 años, ejerce como médico en las zonas rurales de la Región de Los Lagos. Reside en Palena, donde trabaja en el hospital público de dicha comuna. Un auténtico médico de campo, que convive diariamente con familiares de campesinos, obreros o pescadores de la zona.
Al igual que María Elisa, Gaspar tiene un magíster en Salud Pública. Además, es cofundador de la Red Disidente Constituyente, destinada a coordinar la visibilidad y representación de la diversidad sexual en la Convención Constitucional, preocupada de dar un enfoque de Derechos Humanos, con la participación LGBTIQ+.
Ayer se consolidó este proceso democrático con la elección de cinco de los vicepresidentes adjuntos: Tomás Laibe (PS), Amaya Alves, (FA), Bárbara Sepúlveda (PC), Lidia González (Pueblos Yaganes) y Natividad Yanquileo, (Pueblo Mapuche). Aún resta por elegir otros dos vicepresidentes, a raíz de reyertas entre colectivos de la derecha y otras fuerzas.
El discurso de aceptación del cargo, formulado por el doctor Gaspar Domínguez, es una de las piezas oratorias más conmovedoras que se haya escuchado en el hemiciclo de nuestro Congreso Nacional. Lo adjunto a esta columna.
Podemos mirar como promisorio nuestro futuro. A la elección del joven Gabriel Boric como Presidente de la República, debemos añadir ahora estas elecciones en la Convención Constitucional.
Al igual que en septiembre de 1970, cuando Chile inició un proceso inédito de construir una sociedad en vía pacífica al socialismo, bajo la conducción de Salvador Allende, hoy volvemos a despertar el interés de toda la Humanidad, por estar abriendo la senda que permitirá restituir el imperio de la solidaridad y del bien común, poniendo fin al modelo de economía neoliberal.
(*)Miguel Lawner, arquitecto chileno, Premio Nacional de Arquitectura 2019, director ejecutivo de la Corporación de Mejoramiento Urbano (CORMU) durante el Gobierno de Salvador Allende.