Hablemos de la tele. Vacaciones «políticas»

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Nada hace presumir un cambio en el pobre seguimiento que se hace hasta ahora del proceso constituyente que, durante febrero se abocará a debatir en general las propuestas recibidas -de los convencionales, de origen popular y de organizaciones-  sin embargo los medios de comunicación poco o nada hacen para dar a conocer importantes iniciativas actualmente en discusión.

José Luis Córdova. Periodista. 03/02/2022. Pese a que la Convención Constitucional y los partidos políticos, organizaciones sociales, colectivos temáticos no descansan en la época estival, el Parlamento inicia un período de inactividad legislativa. Los canales de televisión aprovechan el receso y se suspenden los programas «políticos», presumiblemente para evaluarlos, estudiar posibles modificaciones, sobre todo en su integración de panelistas y enfoques de coberturas mediáticas.


Nada hace presumir un cambio en el pobre seguimiento que se hace hasta ahora del proceso constituyente que, durante febrero se abocará a debatir en general las propuestas recibidas -de los convencionales, de origen popular y de organizaciones-  sin embargo los medios de comunicación poco o nada hacen para dar a conocer importantes iniciativas actualmente en discusión.


Los noticieros de todos los canales se vuelcan a las playas, el campo o la montaña por el norte y el sur del país, poniendo el acento en paisajes, bikinis, delicias gastronómicas, ritmos de moda y otras entretenciones.

En el mal llamado «canal público» dejó la dirección ejecutiva Francisco «Pancho» Guijón, amigo personal del presidente Piñera que no hizo mayores aportes a una estación que enfrentó interesantes y trascendentes desafíos época de cambios políticos y sociales para nuestro país. Se va sin pena ni gloria, apenas con números azules en sus finanzas, lo que es su único logro.


En tanto, CHV recibe a los nuevos ejecutivos representantes de la transnacional Viacom-CBS con expectativas más comerciales y financieras que culturales o informativos como fuera de esperar. Igualmente Mega prepara su batería de exitosas series turcas, concursos y otros espacios de esparcimiento y ocio, desplazando la política incluso de su programa matinal, donde los periodistas José Antonio Neme y Paulina Allende Salazar intentaron plantear ideas  y  trataron de desentrañar las claves del debate político nacional en abierta competencia con Monserrat Alvarez y Julio César Rodríguez en CHV.

Primaron en los espacios de opinión el desconocimiento de personalidades, cargos y distribución de poderes al interior del gobierno de Boric, limitándose a lanzar especulaciones, conjeturas sobre supuestos roces o quiebres al interior del Frente Amplio, de Apruebo Dignidad y -¡con toda desfachatez!- hasta en el seno del Partido Comunista, incluso demuestran desconocimiento de las atribuciones de los subsecretarios, limitándolas meramente a reemplazar a los ministros en casos de ausencias (!)

La ignorancia -por ejemplo- de los métodos y prácticas en el PC que se erige sobre una dirección única, la unidad de acción, el centralismo democrático y la solidaridad como en ningún otro partido político en Chile hace caer a conductores, animadores y lectores de noticias en opiniones absolutamente reñidas con la realidad.


El último capítulo de «Estado Nacional» (TVN) resultó francamente vergonzoso. Matías del Río se limitó a copiar anodinas preguntas que el diario El Mercurio le formuló el mismo domingo 30  de enero al ex presidente del Banco Central y futuro ministro de Hacienda, Mario Marcel. Preguntas obvias, formales, sin contrapreguntar y dejándose llevar por la rumorología  resultando en una conversación fútil y prescindible. Podría convertirse en una muestra para que los estudiantes de periodismo aprendan cómo no debe hacerse una entrevista.

Iván Valenzuela no logró superar a su competidor desde «Mesa Central» (Canal 13) con una inocua entrevista al secretario general de la Convención Constitucional, Gaspar Domínguez  que más pareció una clase de formación ciudadana (ex educación cívica), para el propio  entrevistador y sus televidentes. En CHV «Tolerancia Cero» no lo hizo mejor.

El asueto veraniego debería convertirse en una pausa fructífera para reflexionar sobre los roles de medios de comunicación tan importantes que vivirán momentos históricamente irrepetibles, como la redacción de la primera Constitución Política del Estado en nuestro país con integración paritaria, con participación de independientes y representantes de pueblos originarios que constituirá un ejemplo para el mundo. Pero, por ahora, los canales gozan de vacaciones.