No hay suficientes recursos para mejorar las pensiones, dar ayudas sociales, construir más viviendas, subir los sueldos, terminar las listas de espera, pero el expresidente Piñera, la viuda de Luksic, los Paulmann, el cuestionado Ponce Lerou y los Angelini tienen multitudinarias riquezas acumuladas, en tanto se niegan a pagar un poco más de impuestos. La contrastante realidad chilena.
“El Siglo”. Santiago. 26/1/2024. Siete personas o familias en Chile, sólo siete, acumulan una riqueza de 41 mil 600 millones de dólares de acuerdo al informe de CEO World Maganize dado a conocer en estos días.
La lista la lidera Iris Fontbona, viuda de Luksic, con 24 mil 100 millones de dólares a su haber. Luego figuran Jean Salata, con 6 mil millones de dólares, Horst Paulmann y familia con 3.200 millones de dólares, el expresidente Sebastián Piñera con 2 mil 700 millones, el mandamás de Soquimich, Julio Ponce Lerou con 2 mil 500 millones de dólares, Roberto Angelini Rossi con mil 700 millones y Patricia Angelini Rossi con mil 400 millones de dólares.
Todas y todos ellos son los mayores súper ricos de Chile y concentran multimillonarios recursos provenientes de áreas comerciales, mineras, grandes tiendas, operaciones financieras, telecomunicaciones, entre otras.
Son los que, por lo demás, se niegan a pagar un poco más de impuesto para contar con recursos para planes sociales.
Esto en un país donde la mitad de la población trabajadora gana alrededor de 500 mil pesos mensuales y la pobreza multidimensional se acerca a un 20%, aunque existen estudios independientes que sitúan en cerca de un 30% la pobreza real en Chile. Hace años que se viene sosteniendo que en Chile reina la desigualdad entre sus habitantes, y la encuesta Casen 2022 señaló que el 20% de los hogares con mayores ingresos monetarios obtiene ingresos 8,2 veces superiores a los del 20% de hogares con menores ingresos. Un estudio del Banco Mundial indicó que un tercio del ingreso generado por la economía chilena en 2013 fue captado por el 1% más rico.
Iris Fontbona está a la cabeza del Grupo Luksic que tiene control sobre el Banco de Chile, y consorcios y grandes empresas en la minería, grupos financieros, alimentos y telecomunicaciones. Andrónico Luksic cumple un rol vital en el grupo familiar. Tienen en sus manos empresas y holding como Quiñenco, Compañía Cervecerías Unidas, Viña San Pedro, Madeco, Compañía Sudamericana de Vapores, Empresa Nacional de Energía, Mina Los Pelambres y otras minas. Los Luksin son dueños de Canal 13 de televisión.
Jean Salata es de origen estadounidense e incursionó con éxito en Chile sobre todo en el mundo monopólico financiero y especulativo. Fundador del Baring Private Equity Asia siempre ha estado ligado a los negocios financieros en Chile y el exterior. Horst Paulmann es fundador de Cencosud, dueño de los supermercados “Jumbo” y “Santa Isabel”, entre otros, del Costanera Center (un enorme sitio comercial), activo en la Bolsa de Valores y con grandes inversiones en el extranjero.
Sebastián Piñera, que fue presidente de Chile en dos períodos, es el ejemplo del triunfador financista especulador, que se mueve activamente en el mundo y el mercado financiero nacional e internacional. Ha estado metido en negocios inmobiliarios, bancarios, de aviación, comunicaciones, negocios crediticios, farmacéuticos, y ha operado en la especulación financiera. Julio Ponce Lerou, siendo yerno del dictador Augusto Pinochet se apoderó de la empresa Soquimich a partir de la cual construyo su fortuna, en algún tiempo fue empresario ganadero, estuvo ligado a “Pampa Calichera”, “Oro Blanco” y “Norte Grande” y también ha estado metido en operaciones financieras especulativas.
En tanto, la familia Angelini ha estado ligada al mundo financiero y empresarial hace años, al frente de empresas y consorcios como Copec, Corpesca, Igemar, Inversiones Angelini, Celulosa Arauco, Abastible, Minera Isla Riesco, Pesquera Eperva, Eléctrica Guacolda, SerCor, MetroGas, Cruz del Sur. Este grupo familiar heredó el negocio de Anacleto Angelini, ya fallecido.
Son los siete personajes y las siete familias multimillonarias de Chile, en un país donde el 1% de la población se lleva alrededor del 30% de las riquezas, en tanto el 50% de las familias chilenas accede a alrededor del 3% de la riqueza del país. Chile es el país más desigual de los países de la OCDE, donde el decil más rico gana 27 veces más que el decil más pobre.
Todo esto cuando en el país se sostiene que falta dinero para pagar mejores pensiones, terminar con las listas de espera en Salud, subir los sueldos, construir viviendas, apoyar a las regiones, y entregar ayudas sociales a las familias más pobres.