Todo parece indicar que el cambio en el gabinete ministerial obedeció, ante todo, a sacar a ministras y ministros que tenían abiertos flancos propios y del Gobierno. Las salidas ministeriales estaban sobre la mesa especulativa por presiones políticas o cuestionamientos tácitos y explícitos en las carteras donde hubo cambios. No se produjo cambio en el comité político de La Moneda, lo que daría cuenta de que, en lo sustancial, persiste la agenda establecida desde el Gobierno.
Hugo Guzmán. Periodista. “El Siglo”. Santiago. 16/8/2023. A las 13:30 horas, en el Salón Montt Vara de La Moneda, simplemente se ratificó lo que un par de horas antes habían informado dos medios de prensa. Por eso, y por circunstancias políticas que rodearon esta modificación ministerial, no hubo mayores sorpresas.
Y todo parece indicar que el cambio en el gabinete ministerial obedeció, ante todo, a un despeje, sacar a ministras y ministros que tenían abiertos flancos propios y del Gobierno.
Ya el viernes pasado había renunciado Giorgio Jackson como titular de Desarrollo Social y Familia, y hoy siguieron las salidas de Marco Antonio Ávila de Educación, Marcela Hernando de Minería y Jaime de Aguirre de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
Eran ministros y ministras que estaban en el centro de la refriega política, con dificultades de gestión, sin poder aterrizar una agenda precisa y fluida, y en la mira de la oposición que no daba tregua. Pero, al parecer, con evaluaciones no positivas al interior de La Moneda y el oficialismo.
Así las cosas, las salidas ministeriales estaban sobre la mesa especulativa por presiones políticas o cuestionamientos tácitos y explícitos en las carteras donde hubo cambios.
Por eso, el despeje tendría que ver con un ajuste político puntual que, entre otras cosas, podría despejar el diálogo con la oposición y, al mismo tiempo, terminar con flancos abiertos para el Gobierno.
La correlación de fuerzas de partidos y conglomerados persistirá en lo sustancial. En lo particular el Partido Comunista tiene un ministro más lo que, entre otras cosas, puede dar cuenta de la disposición de esa colectividad con el Gobierno, y Revolución Democrática pareció no del todo satisfecha, pero quizá no se debería olvidar el difícil momento que atraviesa esa colectividad y el papel de antiguos de sus militantes en el crudo escenario que vive hoy el oficialismo por el “caso convenios”.
Como algo sintomático, se volvió a especular sobre la salida o cambio de ministerio de Camila Vallejo, la actual ministra Secretaria General de Gobierno, con rumores de que reemplazaría a Jackson o se iría del Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género. Todo desmentido por los hechos, como en reiteradas ocasiones anteriores.
Lo concreto es que no hubo cambio en el comité político de La Moneda, lo que daría cuenta de que, en lo sustancial, persiste la agenda establecida desde el Gobierno.
Es decir, podría ser muy osado hablar de “nueva etapa” en la administración del Presidente Gabriel Boric. No habría que perder de vista que continúa el comité político, que siguen al frente de sus carteras los titulares en Interior, Defensa, Secretaría General de Gobierno, Hacienda, Trabajo, Economía, entre otros, lo que indicaría que el rumbo y los énfasis estarían intactos.
Quizá con este ajuste para despejar, haya una situación táctica, sumado a mejorar gestión, en la pretensión de afirmar el diálogo con la oposición para avanzar en posibles acuerdos en torno de materias sensibles como reforma de pensiones y pacto fiscal.
Pese a que ante este cambio ministerial, como otros pasos dados por el Gobierno, las representaciones de la derecha y la extrema derecha lejos de mostrar flexible disposición, continúan apostando por un tono beligerante, descalificador y de “apretar”, incluso ahora colocando a otro ministro en la mira, cuando ni siquiera ha iniciado sus funciones.
Obviamente que en el oficialismo, al final del día, se aspira a que esta modificación en el gabinete ministerial contribuya, más allá de análisis especulativos y búsqueda detrás de las cortinas de la política, a reforzar la gestión gubernamental y avanzar en materias clave.
Claro que las elucubraciones/confirmaciones respecto a lo sucedido, sus protagonistas, y lo que pudiera venir, serán ingredientes para el caldo político de estos días.
Hugo Guzmán. Patricia Ryan. Periodistas. “El Siglo”. Santiago. 16/8/2023. Cada nombre de entrada y salida del gabinete ministerial conlleva reacciones y análisis específicos y apunta a las representaciones de conglomerados en el Gobierno, pero en lo global, en este caso, todo indica que el tercer cambio en el equipo gubernamental apunta a reforzar a los objetivos trazados desde el oficialismo, en un cuadro movedizo y tenso.