Fue el momento para conocer las ideas de sectores ultraconservadores de todo el mundo. Posiciones en contra de la “agenda verde” y políticas medioambientales, rechazo a la diversidad sexual, el divorcio y el aborto, críticas a políticas migratorias y de defensa de derechos humanos, reiteración de cuestionamientos a la “izquierda woke” y los proyectos de transformación, posturas contra los partidos independentistas y el socialismo, y consignas como “Viva España, Viva Estados Unidos, Viva Israel”, “Viva la libertad, carajo”, “Gibraltar, español”. “El loco” Milei sintetizó el sentimiento en el encuentro: “Nunca podemos dar el brazo a torcer en nada, nunca podemos dejarnos retroceder un milímetro por los ‘zurdos’”. Hubo llamados a “salir a la calle” para que la extrema derecha gane las elecciones del Parlamento Europeo.
“El Siglo”. 21/5/2024. Unas 11 mil personas llegaron al Palacio de Vistalegre de Madrid, España, para participar en el encuentro “Europa Viva24”, que juntó a las orgánicas de ultraderecha de todo el mundo. Fue el momento de presentar e irradiar el pensamiento, el sentimiento y el ideario de las fuerzas ultraconservadoras a nivel internacional. Todo fue organizado por el grupo de extrema derecha española, Vox.
Se juntaron los principales representantes de orgánicas ultraconservadoras. Santiago Abascal, jefe de Vox, la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, el Presidente de Argentina, Javier Milei, la cabeza de la extrema derecha francesa, Marine Le Pen, el Presidente de Hungría, Víctor Orban, el ministro israelí de Lucha contra el Antisemitismo, Amijail Chikli, el jefe del Partido Republicano de Chile, José Antonio Kast, el dirigente portugués de ultraderecha, Andre Ventura, y el exprimer exministro de Polonia, Mateusz Morawiecki. Estuvieron presentes en Madrid dirigentes de decenas de partidos y movimientos ultraderechistas, nacionalistas, ultraconservadores y supremacistas.
“Viva España, Viva Estados Unidos, Viva Israel”, “Que no, que no, que no me da la gana, una dictadura como la venezolana”, “Puigdemont a prisión”, “Libertad, libertad”, “Viva la libertad, carajo”, “Gibraltar, español”, fueron consignas gritadas en el Palacio de Vistalegre, entre aplausos cuando hubo afirmaciones como “basta al socialismo maldito y cancerígeno”.
“El loco” Milei representó el estado de ánimo en el masivo encuentro ultraderechista al afirmar que “nunca podemos dar el brazo a torcer en nada, nunca podemos dejarnos retroceder un milímetro por los ‘zurdos’ porque aunque parezca que tienen razón, nunca la tienen, se aprovechan de los más débiles”.
En el acto final del encuentro, Santiago Abascal arremetió contra la “agenda 2030” y el “pacto verde”, cuestionó políticas medioambientales a nivel mundial y volvió a sacar a relucir un cuestionamiento y ridiculización del “pensamiento woke”. Criticó que partidos del socialismo, la izquierda y el progresismo “defienden lo mismo, son amigos de la Agenda 2030 y del Pacto Verde, y validan el pensamiento woke y todos sus disparates”.
Junto al discurso del jefe de la extrema derecha española, varias y varios de los expositores criticaron a la “izquierda woke” y las políticas agrarias y migratorias de la Unión Europea (UE). Hubo rechazo a la diversidad sexual, al divorcio y el aborto, a la “ideología de género” y críticas a promociones de la defensa de los derechos humanos porque no garantizan el orden y la seguridad en los países. Se produjo una reafirmación del ideario nacionalista, de autoproclamación como “patriotas europeos” y “defensores del legado de las naciones con raíces judeocristianas”.
André Ventura, de Portugal, declaró que “no podemos seguir con esta entrada masiva de inmigrantes islámicos y musulmanes en Europa” lo que se sumó a respaldar iniciativas de construcción de muros eficaces y desplazamiento de fuerzas militares en las fronteras para detener la migración. También se alentó en tener medidas eficaces para expulsión de migrantes.
La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, afirmó que “estamos en vísperas de unas elecciones decisivas. Es hora de la movilización, de salir a la calle. Es hora de aumentar las apuestas, tenemos el deber de luchar hasta el último día para que seamos capaces de cambiar la mayoría actual en el Parlamento Europeo”.
Milei planteó que “las ideas y valores de libertad que llevaron a lo más alto a la especie humana corren peligro y necesitan ser defendidas del asedio del maldito y cancerígeno socialismo”. En la línea de tesis que defienden representantes de gobiernos europeos y de entidades como la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), y concepciones del “colectivo occidental”, el mandatario argentino sostuvo que hay que “salvar Occidente de la decadencia…Occidente está a tiempo aun de elegir si quiere persistir en la senda del fracaso o si quiere retomar el camino de la libertad”.
Jorge Buxadé, que encabeza la lista de Vox al Parlamento Europeo, llamó a que la juventud se pliegue a las ideas ultraconservadoras y se aseguren “la oportunidad de tener un trabajo estable, una vivienda digna, una familia fuerte y una patria”. Afirmó: “El futuro es de los patriotas, de los conservadores. El futuro es nuestro”.
Amichai Chickli, ministro de Israel, dijo que gobiernos progresistas y de izquierda quieren recompensar a los palestinos por las masacres que hicieron de ciudadanos israelíes, defendió la guerra desatada contra Palestina y agradeció a las fuerzas de extrema derecha de todo el mundo por el apoyo a Israel.
Varios de los foros fueron organizados por la Fundación Disenso, centro de pensamiento de la ultraderecha española, y se refirieron a la lucha contra la migración ilegal, el nacionalismo, la defensa del catolicismo, la “culturas de la cancelación”, el papel y reforzamiento de los medios de comunicación y el poder político. Se expuso la necesidad de reforzar los centros de pensamiento ultraconservadores y asumir tareas de cultura.
En la interna de España, se dijo que el encuentro tuvo un objetivo electoral de Vox, para potenciarse ante los comicios del 9 de junio cuando se renovará el Parlamento Europeo y lanzarse contra las fuerzas progresistas y de izquierda, sobre todo alentando discursos antimigrantes, contra los partidos independentistas, políticas sociales de la Unión Europea, y contra respaldos a derechos de las mujeres y la diversidad sexual.