Tiene que pronunciarse la Sala del Senado. Ese día veremos quienes están a favor o en contra de la corrupción. Es un imperativo ético terminar con la Ley Longueira. De aprobarse, el proyecto de nulidad contempla un plazo de hasta 2 años para que el Gobierno presente un nuevo proyecto.
Daniel Núñez. Senador. Valparaíso. 31/08/2022. La actual Ley de Pesca es la única legislación chilena en que está probada judicialmente la mano corruptora del poder del dinero.
Tras un largo proceso, la justicia dictaminó fehacientemente que la empresa Corpesca pagó sobornos a dos ex parlamentarios de la UDI para que favorecieran los intereses de la industria en la bochornosa legislación que privatizó los recursos marinos. De esta forma, siete familias se apoderaron a perpetuidad de los peces.
Fue el ex ministro de Economía, Pablo Longueira, durante el inicio del primer Gobierno de Sebastián Piñera, quien orquestó la operación para asegurar de por vida el negocio a las familias Lecaros, Stengel, Yaconi-Santa Cruz, Angelini (Corpesca), Fernández e Izquierdo y Sarquis. Hoy se han fusionado en 4 holdings: Mar Food con capitales extranjeros, Orizon, Camanchaca Pesca Sur y Blumar.
El ex senador Jaime Orpis deberá cumplir una pena de 5 años y un día por recibir 233 millones de pesos, mientras que la exdiputada Marta Isasi, ya cumplió su condena de 50 días en prisión por obtener 25 millones de pesos.
También fue condenada, como persona jurídica, la empresa Corpesca a pagar una multa a beneficio fiscal de 10.000 UTM por el delito de sobornos encabezados por el ex gerente general Francisco Mujica.
Si bien el 2016 con el ex diputado Hugo Gutiérrez no teníamos a la vista el contundente fallo judicial, teníamos la convicción de que la industria pesquera había operado fraudulentamente para privatizar los recursos.
Por esta razón, decidimos presentar un proyecto de ley para declarar la nulidad de la legislación, ya que de esa manera nos evitábamos pagar indemnizaciones que no correspondían. La comparación grafica era la siguiente: Si alguien se roba un auto, no resiste ninguna lógica que el dueño tenga que pagar por el vehículo para recuperar lo que le pertenecía.
Tras un intenso debate constitucional, se aprobó por esos años la nulidad en comisiones, pero el proyecto quedó durmiendo en la Cámara Baja hasta que el pasado 8 de agosto una contundente votación de la Sala de diputadas y diputados aprobó la iniciativa.
Así fue como se logró despertar el proyecto y ponerlo en tabla en la Comisión de Pesca del Senado, la cual presido. Y como ya saben, fue polémica la primera sesión, porque no asistieron los otros 4 integrantes.
En medio del debate que se suscitó, el Gobierno del Presidente Gabriel Boric decidió hacerse parte de la tramitación y le puso suma urgencia al proyecto. De esta manera, la Comisión de Pesca tiene 15 días para despacharlo. Reitero que durante las sesiones serán escuchadas todas las partes involucradas en esta área tan importante de nuestra economía.
Tras la Comisión de Pesca viene el debate en Constitución y luego tiene que pronunciarse la Sala del Senado. Ese día veremos quienes están a favor o en contra de la corrupción. Es un imperativo ético terminar con la Ley Longueira. De aprobarse, el proyecto de nulidad contempla un plazo de hasta 2 años para que el Gobierno presente un nuevo proyecto.
De todas formas, el Gobierno ya anunció que tiene programado ingresar una nueva legislación pesquera en marzo del 2023. Para ello, ahora en septiembre se inicia un proceso de consulta ciudadana para contar con diagnósticos y propuestas. El subsecretario del sector, Julio Salas, detalló que con la pesca artesanal tendrán conversatorios a nivel local y regional, dada las diferencias que existen a lo largo de nuestro país.
La gran mayoría de las caletas y sindicatos quieren modificar el fraccionamiento de las pesquerías, es decir, recuperar la captura de una alta proporción de especies para que los pescados vuelvan al paladar de la gente. Hoy la industria posee altos porcentajes de captura que usan para la fabricación de harina de pescado, insumo esencial para alimentar la industria del pollo…
La nueva Constitución entrega mayores herramientas para que una nueva legislación pesquera sea más sustentable y justa. Además, quita un enorme peso de encima al Estado, ya que se desvalorizan los derechos otorgados a la industria de manera fraudulenta.
El nuevo Chile también lo construimos desde el mar y para beneficio del pueblo.