“Nuestros pueblos deben reaccionar ante claro retroceso civilizatorio y evidente amenaza en contra de la Paz”

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Declaración de la Plataforma Internacional por los Derechos Humanos indicó que las políticas que está implementando Donald Trump, junto a sectores de ultraderecha en varios países, “pone en riesgo la sana y pacífica convivencia entre los pueblos del mundo y empuja a una inevitable conflagración mundial cuyas consecuencias serían desastrosas para las generaciones presentes y futuras”.

“El Siglo”. Santiago. 2/2025. El siguiente es el texto íntegro de una Declaración Pública de la Plataforma Internacional por los Derechos Humanos:

La Plataforma Internacional por los Derechos Humanos, instancia de coordinación que integran diversas organizaciones de derechos humanos de América, Europa y África, desea expresar su profunda preocupación por el retroceso civilizatorio que está sufriendo la Humanidad en el último lustro.

Hemos constatado el creciente avance de la ultraderecha neofascista en Europa y América Latina, que ha llegado al poder a través de elecciones formalmente democráticas, con promesas de gobierno populistas que pretenden canalizar el profundo desencanto de las grandes mayorías nacionales con el sistema capitalista en su expresión neoliberal, el que sólo ha empeorado sus condiciones de vida. A su vez, la reciente elección norteamericana con el triunfo de Donald Trump, cuyo delirio de grandeza mesiánico, guerrerista y expansionista, refleja en toda su dimensión el verdadero carácter imperialista de Estados Unidos, y la grave amenaza que constituye para la Paz y los Derechos Humanos en el mundo.

Cabe recordar que las primeras órdenes ejecutivas de Trump fueron salirse de organismos multilaterales muy relevantes de Naciones Unidas, como el Consejo de Derechos Humanos y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

A lo anterior, es dable mencionar el reciente anuncio de Trump, difundido en una conferencia de prensa conjunta con Benjamín Netanyahu, de tomar el control político y militar de Gaza, develando así el verdadero objetivo del Genocidio cometido por el Estado sionista de Israel con la abierta ayuda y cooperación política y militar de Estados Unidos, cual es expulsar a los dos millones de palestinos que han residido (y resistido) en esos territorios. Además, no ocultó su voluntad de establecer “una posición de propiedad a largo plazo” en dicha zona destruida por las bombas israelíes.

Si agregamos la “guerra arancelaria” declarada por Trump en contra de México, Canadá y China, la que tendrá efectos colaterales graves en las economías de todos los países del planeta, su política estigmatizadora antimigrantes, las recientes medidas de reincorporar a Cuba en la lista de gobiernos patrocinadores del terrorismo, su voluntad de cambiarle el nombre al Golfo de México, de retomar el control del Canal de Panamá, su interés de anexar Canadá y Groenlandia al territorio norteamericano, entre otras, nos muestran su explícito  deseo de convertirse en el gran amo del mundo, de dominar la geopolítica mundial y convertir a las naciones, especialmente las más débiles económica y políticamente, en meras piezas de su engranaje.

Esta situación pone en riesgo la sana y pacífica convivencia entre los pueblos del mundo y empuja a una inevitable conflagración mundial cuyas consecuencias serían desastrosas para las generaciones presentes y futuras.

Agrava la situación descrita, el hecho que en muchos de nuestros países, han surgido dirigentes políticos populistas que han logrado la presidencia, de claro perfil ultraderechista, que no sólo desprecian los Derechos Humanos y su sistema de protección internacional, sino que pretenden emular dichas políticas imperialistas poniéndose a disposición de la administración norteamericana, como ocurre con Javier Milei en Argentina, y Nayib Bukele, en El Salvador. Mientras tanto, otros dirigentes criollos han emergido en nuestros países, aspirando el poder, con el mismo discurso.

La Plataforma Internacional por los Derechos Humanos junto con expresar su grave preocupación por la situación descrita, hace un llamado a todas las organizaciones de Derechos Humanos de los cinco continentes. Nuestros pueblos deben reaccionar ante este claro retroceso civilizatorio y evidente amenaza en contra de la Paz. No podemos permanecer impávidos, Es hora de reaccionar. De volver a confiar en la fuerza de la unidad, la organización y la movilización de nuestros pueblos para frenar esta ofensiva mundial de la ultraderecha y el neo fascismo imperial, que atenta gravemente en contra de los legítimos intereses de las grandes mayorías nacionales y su genuino deseo de vivir en Paz en sociedades más justas, soberanas, verdaderamente democráticas y respetuosas de los Derechos Humanos, única manera de garantizar la plena dignidad de los seres humanos.

PLATAFORMA INTERNACIONAL POR LOS DERECHOS HUMANOS

5 de febrero 2025.-