Representantes de la ultraderecha latinoamericana y europea, principalmente, son los preciados invitados del próximo Presidente de Argentina. En tanto, los más representativos líderes del progresismo y la izquierda estarán ausentes del acto de toma de posesión, con excepción del Presidente chileno que va, se sabe, más “por razones de Estado”.
“El Siglo”. Buenos Aires. 9/12/2023. Javier Milei, el entrante Presidente de Argentina, y su equipo, consideraron que la toma de posesión del ultraderechista debía convertirse, sobre todo, en un encuentro de la extrema derecha.
Para eso, se tomaron algunas decisiones, como invitar a representantes ultraconservadores de varias partes del mundo para que estén en el acto donde Milei asumirá, y que éste, en vez de dirigirse al Congreso del país al momento de asumir como mandatario, le hable a simpatizantes de la extrema derecha que estarán en la calle, frente a la sede legislativa.
Esos serán algunos de los sellos que partirán imponiendo Javier Milei, de quien se espera encabeza una de las administraciones más ultraderechistas, ultraneoliberal, autoritaria, privatizadora, negacionista y regresiva que tenga memoria América Latina y la propia Argentina, superando a Jail Bolsonario en Brasil.
La fiesta de los ultraconservadores incluirá la presencia de mandatarios de corte ultraderechista y nacionalistas, como los presidentes de Ucrania, Volodymyr Zelensky, y Viktor Orbán, de Hungría. Para el ucraniano, Milei ofrece una puerta de mejor respaldo a su Gobierno y en la confrontación con Rusia, y para Orbán se trata de reforzar a la ultraderecha a nivel mundial: “¡Espero comenzar a trabajar con un verdadero patriota!”, dijo hace unos días.
Mandatario de derecha confirmaron su asistencia en Buenos Aires este domingo 10. Luis Lacalle Pou de Uruguay, Santiago Peña de Paraguay y Daniel Noboa de Ecuador. Nayib Bukele, el ultraconservador y autoritario mandatario de El Salvador, estaba feliz de asistir para aplaudir a Javier Milei, pero está legalmente con licencia como presidente porque inició su campaña de reelección en El Salvador. Tampoco llegaría la jefa de estado de Italia, la ultraconservadora Giorgia Meloni, aunque podría hacer un esfuerzo de última hora.
El encuentro entre representantes de la extrema derecha incluyen al exmandatario brasileño, Jair Bolsonaro, admirador y amigo de Milei, a Santiago Abascal, presidente del ultraderechista partido Vox de España, José Antonio Kast, dirigente de la extrema derecha de Chile, y representantes de una veintena de organizaciones de la ultraderecha latinoamericana, europea y asiática. Aquí en Buenos Aires se reportó que no vendrán el exmandatario estadounidense Donaldo Trump, entusiasta de Milei, pero en algunos medios se dice que podría llegar de sorpresa.
En medio de esa escena, el único representativo del mundo progresista y de izquierda sería el Presidente de Chile, Gabriel Boric, quien asistiría “por razones de Estado”, considerando que Argentina es un país limítrofe y con lazos estratégicos con Chile.
Los que no estuvieron dispuestos a participar, fueron los presidentes de Brasil (Luiz Inacio “Lula” Da Silva), de Colombia, (Gustavo Petro), de China (Xi Jinping) y Joe Biden, mandatario de Estados Unidos.
Se dice que los jefes de Estado de Cuba y Venezuela, Miguel Díaz-Canel y Nicolás Maduro, respectivamente, no habrían sido invitados y, cuando mucho, estaría en la ceremonia de toma de posesión los respectivos embajadores.
Como es habitual en este tipo de ceremonias, llegará el Rey Felipe VI de España. Para unos, una señal de no mucha simpatía con el nuevo Gobierno, la delegación de Estados Unidos será encabezada por la secretaria de Energía, Jennifer Granholm, y la de la República Popular de China por el enviado especial de la Presidencia china, Wu Weihua.