El encargado de Asuntos Internacionales del PC de Uruguay indicó además que “no se trata solo de plantearlo sino de cómo se va a enfrentar por parte de las fuerzas amantes de la paz y la democracia” y planteó que en el mundo hay unas 100 guerras activas. Hizo ver el trasfondo del planteamiento de la generala jefa del Comando Sur de Estados Unidos de que “hay que concentrarse sobre América Latina” y sus riquezas naturales.
Victoria Alfaro. “El Popular” (*). Montevideo. 02/2023. El Popular entrevistó al secretario de Asuntos Internacionales del Partido Comunista de Uruguay (PCU), Jorge Mazzarovich. La lucha por la paz, la guerra entre Rusia y Ucrania, los más de 100 conflictos activos en el planeta, el avance de la ultraderecha y el fascismo en el mundo y la ola de luz en América Latina, fueron algunos de los temas tratados.
¿Cuáles son los cuatro puntos más importantes hoy en día en la política internacional y cómo influyen en nuestra sociedad?
Tenemos que ser plenamente conscientes de que la afirmación que hacíamos hace ya bastante tiempo, lamentablemente, se sigue confirmando y es que la Humanidad está viviendo el momento más peligroso con relación a la paz y a su propia existencia desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Esto no es una afirmación al barrer, esto surge del análisis de la situación en el mundo y la brutal política agresiva del imperialismo yanki y de sus lacayos de la OTAN y otros países. Si se parte de la base de que es el momento más peligroso no se trata solo de plantearlo sino de cómo se va a enfrentar por parte de las fuerzas amantes de la paz y la democracia y que se pronuncien claramente contra los responsables de esta situación que encabezados por el imperialismo norteamericano se agrupan en la OTAN y otros agrupamientos del estilo.
¿La economía mundial influye en este escenario mundial y lo que se llama la crisis pos-Covid?
Claro, la situación económica es la base de cualquier análisis y la situación de riesgo y de peligro que hablamos antes tiene que ver directamente con que el imperialismo quiere avanzar y las multinacionales, cada vez más, se adueñan de sectores enteros, en un mundo donde la producción ha cambiado debido a la tecnología de la información, con sus inmensas ventajas y enormes peligros como la concentración, cada vez mayor, de la información y la comunicación y de las riquezas que todo esto genera. El análisis de la situación económica es clave. Esta muestra un mundo absolutamente desigual donde se multiplican los multimillonarios, con una gran concentración de la riqueza que se paga con una mayor pobreza. Estamos hablando de un mundo donde millones de seres humanos mueren todos los días por enfermedades que pueden curarse, por hambre o por las guerras que se están desarrollando.
Hablando de los conflictos vigentes hoy en día, las resoluciones del pasado XXXII Congreso del PCU hablan de más de 100 guerras que siguen activas.
Exactamente, la más publicitada es la guerra entre Ucrania y Rusia. La OTAN encabezada por Estado Unidos, está librando una guerra contra Rusia desde Ucrania. A esta altura los cálculos más serios ya sitúan en muchos billones de dólares la supuesta ayuda que le está llegando a Ucrania. Pero, lo que ocultan esas informaciones es que casi la totalidad de la ayuda son armas, donde los gobiernos de los distintos países les pagan a los fabricantes de armas, que quieren que la guerra dure años, pero en la guerra se muere la gente, sea cual sea su nacionalidad, su color, su edad. En primer lugar, los que mueren son los trabajadores, los pueblos, los que nada tienen, los otros están a buen recaudo y el resultado de este conflicto (hacer futurología no se puede), es absolutamente incierto, pero los objetivos del imperialismo están claros, independientemente de que nosotros hemos rechazado esa guerra. En el medio de todo eso hay una guerra en la práctica entre Azerbaiyán y Armenia, también ataques concentrados sobre la soberanía de China, por otra parte, parece que la matanza de palestinos se transformó en algo natural: ayer murieron nueve, hoy asesinaron ocho, fallecieron tantos niños y, sin embargo, hay muy poca capacidad de reacción en algunos lugares del mundo y nosotros formamos parte de él. Además, tenemos el Gobierno de España que hace un acuerdo con el brutal Gobierno de Marruecos sobre la cabeza de los saharauis y del Frente Polisario. Las guerras terribles que se desarrollan en África, en Mali y en Yemen, en distintos lugares de un continente nuevamente olvidado. Acá no hay posibilidad de olvidar nada porque el mundo es uno solo y porque los que concebimos y luchamos por un mundo distinto, no podemos olvidar ninguna de las luchas que se libran para derrotar al sistema capitalista que es el responsable directo de esto y a su fase superior que es el imperialismo.
Relacionado a esto ¿cómo se analiza el avance de la ultraderecha y el fascismo en el mundo?
Eso es una realidad, lo peor que podemos hacer los revolucionarios es no prestarle atención a aquello que nos produce dolor o que no está en ese momento en el centro de las preocupaciones. Nosotros tenemos que mirar la realidad cara a cara y el avance de la ultraderecha es extraordinariamente peligroso y ya está sucediendo. Donald Trump dirigió Estados Unidos, ahora parece que lo dirige Joe Biden y ¿qué cambios hay? Y bueno, no hay muchos que digamos, pero ese es el corazón del imperialismo norteamericano. A su vez tuvimos aquí muy cerquita (en Brasil) hasta hace muy pocos días, a Jair Bolsonaro, un fascista con todas las letras. Somos revolucionarios de izquierda y las cosas hay que caracterizarlas como son, eso sí, siempre después de haberlas estudiado bien. El avance de la ultraderecha tiene algunos ejemplos muy claros, la primera ministra de Italia (Giorgia Meloni) se reconoce públicamente como fascista mussoliniana. También podemos ver el avance del PP y el VOX, la derecha franquista y fascista en España. Suecia y Finlandia (que siempre fue neutral) están dispuestas a albergar armas nucleares para respaldar a Ucrania y hablan así para EE.UU., Alemania y Japón. Es la victoria de la ultraderecha fascista, ahora, se puede decir que es un panorama desolador, pero no es así. No lo es porque se va tomando conciencia y cada vez se desarrolla con más fuerza las luchas de los trabajadores y los pueblos también en Europa. Los motivos del avance de la ultraderecha se están analizando y en parte lo hemos procesado en el congreso de nuestro partido, que culmino hace unos meses y que desde el punto de vista del análisis de ese fenómeno no ha variado demasiado.
En América Latina la situación política es diferente.
En nuestro continente hay diferencias muy grandes, es imprescindible mencionar las victorias de Lula Da Silva (Brasil), la de Gustavo Petro (Colombia), la de Gabriel Boric (Chile), entre otras. Se puede decir que son victorias electorales, sí, algunas de las otras donde se expresa el avance de la ultraderecha también. Aunque aquí están respaldados por grandes masas, sin ir más lejos, ayer se realizaron las elecciones regionales en Ecuador y la izquierda (Revolución Ciudadana) salió victoriosa en las principales regiones, incluyendo la capital del país. La victoria de Petro en Colombia es muy importante en un país con décadas de matanzas, donde el imperialismo tiene ocho bases instaladas, algunas de las más importantes del mundo. Desde allí operó durante todo este tiempo para atacar a los movimientos en Colombia y en todo el continente. Tenemos la victoria de Luis Arce en Bolivia, un gobierno con una enorme importancia. En este escenario una de las cosas más importantes para analizar y tener en cuenta son las expresiones, insólitamente francas, de la jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, general Laura Richardson, uno de los cargos más importantes del Pentágono de Estados Unidos.
¿Qué significa y alcance tiene el Comando Sur?
Bien, en situaciones de crisis el Comando Sur está bajo el mando directo del presidente de EE.UU., aunque depende siempre del jefe del Pentágono y su radio de acción se encuentra sobre todo el continente al cual pertenecemos con tanto orgullo. Richardson está siendo muy sincera al explicar porque EE.UU. tiene una preocupación especial, dedica tanto dinero y recursos para financiar entrenamientos, atentados, provocaciones y golpes de Estado. El Comando Sur también actúa junto a la CIA y otras reparticiones, como estuvo atrás del Plan Cóndor, confirmado por ellos mismos. Esta señora dice que hay que concentrarse sobre América Latina, porque cuenta con ricos recursos naturales y elementos de tierras raras (de gran riqueza) y afirma que el 60% del litio (necesario para la tecnología de los celulares, por ejemplo) del mundo, está en el triangulo del litio: Argentina, Bolivia y Chile. Luego recuerda que las reservas de petróleo más grandes del mundo, incluidas las de crudo ligero y dulce, están en este continente, también habla de los recursos de Venezuela, con petróleo, cobre y oro y tampoco se olvida de los pulmones del mundo, destacando la importancia del Amazonas. Además, habla del agua y dice “tenemos (vean como se lo atribuyen a ellos) el 31% del agua dulce del mundo en esta región”, luego concluye que a EE.UU. le queda mucho por hacer y que ésta región es importante y luego agrega el latiguillo constante con que el imperialismo comete sus mayores barbaridades: “tiene mucho que ver con la Seguridad Nacional y tenemos que empezar nuestro juego”. Uno lee esto y se pregunta ¿todavía no empezaron su juego?, pero si tienen encima millones de muertos latinoamericanos por el delito de haber luchado por la soberanía de nuestros países, por la libertad de nuestros pueblos, por la democracia, que es enemiga frontal del imperialismo. La democracia real es enemiga frontal del imperialismo, por eso cada vez que pueden, la barren y fuerzan las situaciones, tampoco les interesa el camino, ni los muertos, ni las perdidas.
Lo que está pasando en Perú ahora.
Justamente, en Perú tenemos que ser conscientes de que hay un pueblo entero en la calle luchando, y esta es una cuestión que también nos diferencia de la situación de otros continentes y que nos lleva no solo a tener la mayor información posible de Perú, ya que hay que denunciar la matanza que están haciendo con el pueblo peruano, pero hay que hacer cosas más concretas de solidaridad en nuestro país y empiezo por nosotros mismos. Compartir con el movimiento sindical, estudiantil, con la Universidad, con los frenteamplistas, con todas las fuerzas democráticas de este país. ¿Quién puede estar de acuerdo con que las movilizaciones pacíficas en la calle, sin una sola arma, sean reprimidas con tanta ferocidad? Ya están arriba de los 60 muertos reconocidos. Todos los días hay marchas de protesta con la gente bajando hacia la capital con los niños al hombro y esas fueron atacadas y ya decretaron el Estado de Emergencia en siete regiones de Perú. Eso supone que los militares y la policía son el verdadero poder en esos lugares y sabemos cómo actúan. Por eso es importante la solidaridad con Perú, un enorme país, extraordinariamente rico, con minerales muy ricos, en algunos casos son el primer productor del continente, en otros los segundos en el mundo. Además, está enclavado en el corazón mismo del continente, tiene frontera con Ecuador, Colombia, Bolivia, Brasil, Chile. Todos debemos tener en cuenta lo que está en juego. Los uruguayos tenemos que ver como elevamos como tema central y permanente la solidaridad antiimperialista.
(*)Medio colaborativo con El Siglo.