El país centroamericano “está en la situación más crucial desde que la sociedad civil echó a Otto Pérez Molina de la presidencia en el 2015. Lo que ocurra en la segunda vuelta de las elecciones determinará si el Estado empieza a ser rescatado de las mafias corruptas, por la vía eleccionaria, o si entramos en una explosión social. Lo que es evidente que no se tolerará la continuidad de la dictadura de la corrupción”.
Raúl Molina Mejía(*). Santiago. 7/8/2023. En mi artículo en La Hora, periódico guatemalteco, daba un panorama del proceso electoral y planteaba su posible desenlace.
En un Estado secuestrado por mafias criminales y corruptas -entre más de 200 presos políticos, José Ruben Zamora, director de El Periódico, cumple un año de injusta prisión, por criticar al régimen de Giammatei, y Virginia La Parra, ex Fiscal contra la corrupción y la impunidad, lleva muchos meses de terrible cárcel, como castigo del régimen contra la Comisión Internacional Contra la Corrupción y la Impunidad en Guatemala (CICIG), con la cual ella colaboró- me puedo quedar corto al visualizar los peligros y amenazas para la voluntad ciudadana en la segunda vuelta electoral del próximo 20 de agosto.
Hace apenas cuatro años se bloqueó la candidatura presidencial de Thelma Aldana con el Movimiento Semilla, contra quien había un plan B contemplado por las mafias, para capturarla, enviarla a prisión y asesinarla dentro de la misma, de no abandonar el país. Hay dentro de estas mafias exmilitares contrainsurgentes, responsables de genocidio y tierra arrasada, con 200.000 ejecuciones extrajudiciales y 45.000 desapariciones forzadas durante el conflicto armado interno (1960-1996), quienes han gozado y pretenden seguir gozando de impunidad total.
Dice mi artículo del 28/07: “Guatemala está en la situación más crucial desde que la sociedad civil echó a Otto Pérez Molina de la presidencia en el 2015. Lo que ocurra en la segunda vuelta de las elecciones determinará si el Estado empieza a ser rescatado de las mafias corruptas, por la vía eleccionaria, o si entramos en una explosión social. Lo que es evidente que no se tolerará la continuidad de la dictadura de la corrupción”.
“El camino al 20 de agosto no está expedito, porque el Ministerio Público, la Fiscalía General, maniobra, pese a la firme y creciente condena nacional e internacional, para que la segunda vuelta no se realice, y las mafias corruptas, dirigidas por el presidente Giammattei, se mueven para consumar su ‘autogolpe’. El temor a un gobierno honesto, como el que sería el de Bernardo Arévalo, ha hecho que se rompa con la ‘legalidad’ y ‘apego a la constitución’, abusando de sus mandatos para realizar lo que denomino: el ‘Terrorismo de Estado Judicial’ (lawfare). Creo, sin embargo, que la presión internacional es tan fuerte, con Estados Unidos del lado del respeto de la voluntad ciudadana, que todas las maniobras no impedirán la segunda vuelta entre los partidos UNE y Movimiento Semilla”.
“Con vigilancia internacional y presencia de la ciudadanía en las calles, la indignación popular contra la dictadura de la corrupción, a la cual se ha aliado Sandra Torres, será reflejada en votos honestos que elegirán a Bernardo Arévalo. Se derrotará a Sandra, a pesar del pactado apoyo de ‘Vamos’, partido político del Presidente, y de personajes en el Gobierno, con acarreos, compra de votos, alineamiento de alcaldes e intentos de fraude en las urnas y electrónicamente”.
“¿Qué vendrá después? Al ganar Arévalo, las mafias corruptas desconocerán los resultados y denunciarán fraude, con acusaciones montadas por el Ministerio Público. Pedirán a las cortes que anulen la victoria de Semilla y Arévalo, utilizando el retorcimiento de la ley y confiando en que las y los magistrados, todos corruptos, les respalden. La presión internacional y de la ciudadanía en las calles superará a este Estado secuestrado; pero las condiciones estarán dadas para el ‘cuartelazo’, con un ejército ‘obediente y no deliberante’”.
“Se ha empezado a forzar, desde ahora, la intervención de las Fuerzas Armadas, ya sea se dé a plazo corto o en los días siguientes a la segunda vuelta. Se buscarán toda clase de excusas para venderles la idea a las capas medias y clase dominante, aduciendo comunismo, destrucción de la familia, eliminación de la propiedad privada de vivienda, la nacionalización de todos los medios de producción, eliminación del ejército, impotencia ante la violencia y demás mentiras, El gran freno será EE.UU.; ningún golpe militar ha sido exitoso en América Latina sin contar con su luz verde (sólo las revoluciones dejan a un lado el imperio). ¿Podrían las y los corruptos seguir gobernando, ignorando a la comunidad internacional, a la cual ya han acusado en la OEA de ‘injerencia extranjera’? Estoy convencido que no”.
La ciudadanía iría al estallido social, los paros nacionales sucesivos y, eventualmente, la revolución, sin que el régimen pudiera justificar su agresiva represión. La Resistencia de hoy será la Victoria en agosto, para iniciar en enero el desmantelamiento completo de la “maquinaria de la corrupción”.
Estamos decididos a luchar y somos cautelosamente optimistas.
Termino mis palabras con una propuesta de alianza para los próximos meses, cuando el 14 de enero se instaure el nuevo Gobierno. Acompañen nuestro proceso de liberación nacional con su solidaridad y nosotros ofrecemos nuestro pequeño grano de arena para lograr una nueva Constitución positiva para el pueblo chileno o rechazar contundentemente cualquier propuesta que no lo sea. Es una alianza para la solidaridad mutua y la solidaridad latinoamericana.
Estamos iniciando hoy el fondo de apoyo a la nueva primavera democrática de Guatemala. Los ingresos recolectados con esta actividad irán en esa dirección, al igual que donaciones que confiamos seguirán dándose por muchas personas chilenas. ¡Muchas gracias!
(*)Raúl Molina Mejía, es miembro de la Asamblea Ciudadana Contra la Corrupción y la Impunidad en Guatemala, Capítulo Chile, y Vicepresidente de la Red por la Paz y el Desarrollo de Guatemala.