Es previsible que la candidatura comunista a La Moneda vaya a generar un importante impacto en la carrera presidencial y se convertirá en un actor o actora muy incidente en el escenario político.
“El Siglo”. El Editorial. 28/3/2025. Hay muchas y muchos nerviosos con la decisión que vaya a tomar el Partido Comunista respecto a su candidatura presidencial. Los nervios llevan a que algunas y algunos lancen cuestionamientos a la colectividad y a quienes se mencionan como posibles aspirantes a La Moneda desde las filas comunistas.
Es perceptible que sectores políticos presionan y estimulan especulaciones y fantasmas respecto a la decisión que deba tomar el Partido Comunista.
Como también es perceptible que el PC decidió, en su instancia de dirección política, entrar a la discusión y diseño de “una plataforma programática” como algo fundamental antes de decidir sobre quién podría ser el candidato o candidata a la presidencia. Es decir, definir una propuesta de nuevo Gobierno, que sea la pauta para quien entre en la carrera presidencial.
Es muy probable que parte del nerviosismo o la explicable expectativa sobre la candidatura comunista a La Moneda se deba a que el PC cuenta hoy con personalidades capaces de ganar una primaria del sector progresista, de izquierda y que aglutina hoy al oficialismo.
Con ello, no está cerrada la puerta a que sea un militante o una militante del PC, quien represente al campo progresista, de izquierda y democrático en la primera vuelta presidencial de noviembre.
Sumado a eso está la evidente gravitación del Partido Comunista en el escenario político y social, las simpatías que despiertan en amplios sectores del pueblo muchos de sus liderazgos, los logros que pueden mostrar muchas y muchos de sus militantes en ámbitos legislativos, municipales y de Gobierno, y su permanente compromiso con causas sindicales, estudiantiles, de derechos humanos, feministas, entre otras.
En este marco, por cierto, el PC tiene también un enorme desafío respecto a sus candidaturas al Senado y la Cámara de Diputadas y Diputados, algo nada menor considerando la importancia que tendrá el futuro Congreso en el devenir de proyectos y políticas públicas, y la correlación de fuerzas que allí se instale.
Por eso no se debería minimizar el análisis que se está haciendo en la colectividad de la hoz y el martillo sobre sus postulaciones al Poder Legislativo.
Puede ser natural que en semanas de definiciones de todas las fuerzas políticas, considerando los plazos legales en el proceso electoral, surjan ansiedades, a lo que no escapa el Partido Comunista. Pero en estos días ha quedado claro que el PC está barajando sus ritmos y sus pautas.
Como sea, es previsible que la candidatura comunista a La Moneda vaya a generar un importante impacto en la carrera presidencial y se convertirá en un actor o actora muy incidente en el escenario político.