Los ecuatorianos podrían elegir presidenta a Luisa González, del Movimiento Revolución Ciudadana, y los guatemaltecos a Bernardo Arévalo, candidato del Movimiento Semilla. Comicios cruzados en Ecuador por la violencia y en Guatemala por irregularidades. Los resultados apuntarían a reforzar el grupo de mandatarios de izquierda y progresistas en América Latina.
Regina Reyes. Periodista. “El Siglo”. Ciudad de México. 18/8/2023. Este 20 de agosto se realizarán elecciones presidenciales en Ecuador y Guatemala. En el primer país, un proceso cruzado por la violencia con un duro componente del narcotráfico y el crimen organizado. En el segundo, unos comicios caracterizados por denuncias de irregularidades y tensiones. Por lo demás, en ambos casos con la posibilidad real de que los resultados apunten a reforzar el grupo de mandatarios de izquierda y progresistas en América Latina.
Para sorpresa de algunos, Bernardo Arévalo, candidato del Movimiento Semilla, de corte socialdemócrata y progresista, tiene opciones de ganar este domingo a Sandra Torres, de la derechista Unidad Nacional de la Esperanza (UNE).
En el cierre de campaña, Arévalo dijo que “hemos recorrido un largo camino construido con honestidad, dedicación y esmero en la lucha por un país mejor, por hacer realidad un sueño que no es de necios, sino de personas profundamente convencidas de que es necesario defender el bien común”.
Pero a 48 horas de los comicios persistieron los problemas para el Movimiento Semilla. El Fiscal, Rafael Curruchiche, anunció que “no descartamos allanamientos, no descartamos órdenes de aprehensión, no descartamos solicitudes de antejuicio (eliminar fueros)” en contra de ese movimiento, en lo que sería otra arremetida judicial contra el colectivo de Arévalo. Hace unas semanas intentaron, por esa vía, sacar a este sector de la carrera presidencial.
La irrupción del Fiscal contra Semilla se inició desde que Arévalo dio la sorpresa en la primera vuelta electoral del 25 de junio y pasó a segunda vuelta junto con Torres de la UNE. Por cierto, Estados Unidos, hace un tiempo, puso a Rafael Curruchiche en una lista de funcionarios corruptos.
Arévalo, sociólogo de 67 años, lidera la intención de voto, las encuestas le dan entre 55 y 65 por ciento. Su triunfo sería una enorme derrota para la derecha y sectores vinculados al empresariado guatemalteco.
Sandra Torres, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), es la exesposa del expresidente Álvaro Colom, representa a la derecha, a grupos evangélicos y sectores conservadores. Tendría menos del 55% de intención de voto.
El aspirante del Movimiento Semilla centra sus objetivos, de llegar a la presidencia de Guatemala, en la lucha contra la corrupción, el crecimiento de la economía, la mayor inversión social y sanear el escenario político y judicial. Entre otras cosas, aspira a una inversión en infraestructura de más de 27 mil millones de quetzales, casi 3 mil 500 millones de dólares, la generación de un millón de empleos, avanzar en construcción de viviendas dignas, reducir las brechas en educación y salud, y apoyar al campesinado y sectores indígenas.
“Vamos a ser la sorpresa, porque un pueblo que reclama su dignidad no puede ser detenido. Gracias por su entrega, por compartir el sueño de que puede haber una Guatemala libre” dijo Bernardo Arévalo.
En Guatemala deben votar 9 millones 361 mil 68 personas, están habilitados 3 mil 482 centros de votación con 24 mil 427 mesas electorales instaladas en escuelas públicas, salones municipales, centros deportivos y otros lugares, según datos de la autoridad electoral.
Revolución Ciudadana adelante en Ecuador
En Ecuador, la candidata presidencial, Luisa González, del Movimiento Revolución Ciudadana, fundado por el expresidente Rafael Correa, está al frente en las encuestas y sería electa como mandataria este domingo.
González, exdiputada socialista, de 45 años, indicó durante la semana que “este es el momento de levantar a Ecuador con dignidad, pese a las duras circunstancias que atraviesa”.
Como se recordará, hace unas semanas fue asesinado a tiros el candidato presidencial Fernando Villavicencio, del Movimiento Concertación y Movimiento Construye, fue asesinado por una banda del crimen organizado, generando una crisis política, social y de seguridad en Ecuador. Y luego fue ultimado a balazos Pedro Briones, líder de Revolución Ciudadana en la provincia de Esmeraldas.
Eso tensó la elección presidencial ecuatoriana, y apuntó en contra de sectores de la derecha y la extrema derecha identificadas, por un lado, con la incapacidad de contener al narco y el crimen organizado, y de otro lado, con posturas de violencia y autoritarismo. De hecho, el actual mandatario Guillermo Lasso es responsabilizado del clima violento en su país, y fue duramente criticado al disolver el Parlamento cuando se trataba una acusación en su contra.
Unos 13 millones de ecuatorianos y ecuatorianas deben concurrir a votar este domingo para elegir a la nueva mandataria o nuevo mandatario y a 137 miembros de la Asamblea Nacional.
El Movimiento Revolución Ciudadana ha convocado a concurrir a sufragar y lograr que Luisa González gane en primera vuelta. Debe obtener, a lo menos, el 40% de los votos. Ella declaró que “nos jugamos la continuidad de la derecha o el retorno de la Revolución Ciudadana”.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) ratificó a Christian Zurita como candidato presidencial en reemplazo de Villavicencio, del Movimiento Construye, en una contienda que se presentan nuevo candidatos de derecha, izquierda y el progresismo.