TVN censuró abiertamente la entrevista de la colega Carolina Urrejola a la excandidata presidencial Carolina Tohá y sólo se permitió exhibir fragmentos de la conversación donde anunció su incorporación al comando de Jeannette Jara junto a otros conspicuos representantes de la ex Concertación.
José Luis Córdova. Periodista. “El Siglo”. Santiago. 11/11/2025. La supina estulticia de prohibir la difusión de encuestas dos semanas antes de la primera vuelta de las elecciones presidenciales no inhibe el conocimiento de los avances y retrocesos en las campañas de los actuales 8 candidatos a La Moneda. Los canales de televisión, así como otros medios de comunicación y redes sociales sólo dan cabida a rumores, especulaciones, falsedades y otras fechorías durante este período.
Mientras Evelyn Matthei debe arreglárselas para “explicar” el infamante spot publicitario de la franja electoral, donde agredió verbalmente a los candidatos Jannette Jara y José Antonio Kast e insultó directamente al Presidente de la República, otros postulantes como Johannes Kayser amenaza con retirar a Chile de organismos internacionales, terminar con las perspectivas de género en la administración del Estado, reimplantar la pena de muerte y otras exageraciones.
TVN censuró abiertamente la entrevista de la colega Carolina Urrejola a la excandidata presidencial Carolina Tohá y sólo se permitió exhibir fragmentos de la conversación donde anunció su incorporación al comando de Jeannette Jara junto a otros conspicuos representantes de la ex Concertación.
Es probable que la mentada “aguja” de las preferencias electorales se mueva todavía tras el último debate de este lunes que transmitieron todos los canales pertenecientes a ANATEL aunque nadie puede adelantar cómo votarán los más de tres millones de ciudadanos no habituales en estas citas cívicas porque no les interesa la política, porque no les gustan los candidatos o simplemente porque no les dan las ganas, aunque ahora el voto es obligatorio.
La oposición se esmera en sus críticas al actual gobierno e intenta identificar la campaña de Jara como la continuadora de la actual gestión, mientras la candidata insiste en manifestar que se trata de “profundizar y extender” las conquistas y transformaciones iniciadas por el presidente Boric ahora con una alianza política más amplia que va desde el PC hasta la DC en el futuro gobierno.
Nada de esto vale para la derecha enfrascada en disputas internas que hacen cada vez más compleja su acción común y eficaz tras una factible segunda vuelta -donde deberán sumarse desde la extrema derecha hasta la denominada “derecha democrática- y más difícil todavía parece la posibilidad de garantías de gobernabilidad para un sector político disgregado y enfrentado en sus bases y valores, como se muestra diariamente en los programas de televisión -matinales o noticiarios- y en los espacios políticos.
El alcalde de Santiago Mario Desbordes protagonizó otro incidente trasgresor al anunciar su apoyo público a un candidato a diputado republicano en desmedro de la postulante de su partido Renovación Nacional, la actual diputada Ximena Ossandón a la reelección. Todo indica que tras esta “rebelión” electoral está la sorda disputa por la presidencia del RN donde se mantiene fuertemente cuestionado el senador Rodrigo Galilea a la cabeza a quien un sector de la derecha responsabiliza por el fracaso de ir divididos a los próximos eventos electorales, incluidos la Presidencia de la República.
Estulticia y fechorías de una derecha que se juega parte de su futuro en esta primera vuelta de la carrera presidencial como si fuera una elección primaria del sector. Mientras, la candidata del oficialismo -sin embargo- no corre con ventajas en los medios de comunicación -incluidas redes sociales y plataformas- que evitan deliberadamente que Jeannette Jara aparezca demasiado en pantalla y logre transmitir sus propuestas programáticas, salvo en la franja electoral y en el último debate del día 10 de noviembre, seis días antes de la primera vuelta.
