Con la aprobación en la Cámara Baja del FES, con una contunden mayoría, significó un muy buen logro del gobierno y el avance de una de las iniciativas sentidas y estratégicas para el oficialismo. Por ello, se plantea que la salida de ministros, en la forma que ocurrió, pudo eclipsar o bajar el tono al éxito de la aprobación de esa iniciativa. Son días de controversias y especulaciones.
Gonzalo Magueda. Periodista. “El Siglo”. Santiago. 21/8/2025. Un ambiente enrarecido y extraño, sobre todo ante la opinión pública se produjo con hechos contrastantes en estas 24 horas: lo positivo de la aprobación del nuevo modelo de Financiamiento para la Educación Superior (FES), con lo que se le dice “chao al CAE” (Crédito con Aval del Estado), lo polémico de la, al parecer, petición de renuncia al ministro de Agricultura Esteban Valenzuela, militante de la Federación Regionalista Verde Social (FRVS), y la sorpresiva dimisión del titular de Hacienda, Mario Marcel.
Con la aprobación en la Cámara Baja del FES, con una contunden mayoría, significó un muy buen logro del gobierno y el avance de una de las iniciativas sentidas y estratégicas para el oficialismo. Por ello, se plantea que la salida de ministros, en la forma que ocurrió, pudo eclipsar o bajar el tono al éxito de la aprobación del FES.
Y es que la salida de Valenzuela ocurrió en medio de una controversia porque la especulación apunta a que el Presidente Gabriel Boric lo sacó en tanto militante de la FRVS, colectividad que se apartó de un acuerdo de las fuerzas del oficialismo para conformar la lista parlamentaria para las elecciones de noviembre próximo y que, además, incluyó en su pacto a legisladores que han torpedeado a La Moneda. Y cuando no se apaciguaban los efectos por ese episodio, Marcel anunció su salida de la estratégica cartera de Hacienda, aduciendo razones personales pero dejando una estela de interpretaciones y reacciones encontradas.
Sin duda, ambos casos, y por motivos al parecer distintos, causaron un impacto político y habrían dañado el positivo efecto del FES. Parece obvio que el oficialismo no pudo sacarle punta a la aprobación de ese emblemático proyecto y el escenario político fue cruzado por las salidas de Valenzuela y Marcel y el remezón en el gabinete ministerial.
Afirmaciones como “el fin del gobierno”, “falta de conducción política”, “mal manejo de los tiempos” se instalaron en vocerías y notas de prensa, aunque es previsible en hacia el fin de semana salgan explicaciones desde el gobierno a esta situación. Pero no parece desechable la idea de que lo ocurrido en estos días tiene un efecto no del todo claro ni positivo.
El avance del FES
La iniciativa de nuevo modelo de Financiamiento para la Educación Superior fue aprobada por 80 votos a favor, 51 en contra y 6 abstenciones. Un buen resultado, sobre todo considerando que la correlación de fuerza para el gobierno no es la mejor en la Cámara Baja. Ahora el proyecto pasará al Senado donde se viene una discusión ardua. Se aprobaron en votación particular diversos artículos con indicaciones solicitados por la oposición.
Contenidos globales de la iniciativa tienen que ver, precisamente, con un nuevo modelo de financiamiento, poner fin al Crédito con Aval del Estado (CAE) y las deuda en ese sistema, el Fondo Solidario con la Corporación de Fomento (Corfo). El FES reemplaza los instrumentos de créditos actuales, no genera una deuda formal para los estudiantes, excluye a la bance préstamos o financiamientos de estudios y elimina la necesidad de contar con avales,
En cuanto al CAE, el plan de su término contempla una condonación mensual, el pago de cuotas más bajas que las actuales y que no supe el 8% del sueldo mensual de quienes tienen la deuda.
Quienes saldaron la deuda CAE, tendrán beneficios tributarios, una rebaja del impuesto global complementario o impuestos de segunda categoría correspondientes a 4 UF anuales para personas egresadas y 6 UF anuales en caso de no haber terminado los estudios.
Para el ministro de Hacienda, Mario Marcel, quien asistió por última vez en esa calidad a la Cámara de Diputadas y Diputados, destacó que la actual iniciativa “mejora la recuperabilidad de parte de los egresados de la educación superior. Y mejora la cobranza porque pasa a ser responsabilidad del Servicio de Impuestos Internos y de la Tesorería General de la República”.
El ministro de Educación, Nicolás Cataldo, en entrevista en Radio ADN, dijo que “estoy muy contento y ahora pensando en los siguientes pasos”, sobre todo en el Senado. Indicó que “hay un primer diagnóstico que es compartido, donde tenemos diferencias en algunos aspectos de la forma en que estamos proponiendo que se haga, y eso es lo que tenemos que resolver en el Senado”.
En todo caso indicó que “tengo mucha certeza y convicción de que vamos a lograr construir un acuerdo, espero que prime esa voluntad. Esto es una necesidad impostergable, desde el punto de vista social, fiscal e institucional“.
Cataldo precisó que “tenemos que ser capaces de estructurar un acuerdo que no solamente se sostenga en el Senado, sino también tiene que sostenerse en la Cámara de Diputados, porque luego el proyecto tiene que volver a su tercer trámite”.