LA ENTREVISTA PRIVADA. El testimonio de dos participantes en la tarea militar del Partido Comunista

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Se cumplieron 50 años de La Tarea desarrollada por el PC desde el 16 de abril de 1975, la cual tuvo diversos desarrollos y destinos. Iván Rodríguez, quien estuvo en Vietnam y César Quiroz, parte del llamado Grupo de los Búlgaros, narran sus experiencias y entregan su visión política de lo que definen como uno de los “hitos históricos” de la colectividad y que, dicen, llenó el “vacío histórico” del que se habló después del golpe de Estado. La reivindicación de una experiencia vinculada directamente a la resistencia y la defensa frente a una dictadura que masacraba, ejecutaba, desaparecía y torturaba a ciudadanos y militantes de izquierda.

Hugo Guzmán. Periodista. “El Siglo”. Santiago. 4/2025. ¿Cómo y por qué partió esta Tarea Militar del Partido Comunista?

César Quiróz. La tarea militar del Partido Comunista fue una decisión de la dirección del partido, en esos años, respecto a un ofrecimiento que le hacen los líderes de la Revolución Cubana, en particular Fidel y Raúl. Hay mucho de mito respecto a esto. En los últimos días, el presidente del partido, Lautaro Carmona, fue haciendo más luces respecto a este tema, ir precisando quiénes fueron los actores. Pero en concreto era el ofrecimiento de formar cuadros militares profesionales del Partido Comunista de Chile en las academias y escuelas militares de Cuba.

¿Y esas nuevas luces?

Respecto de los participantes. Porque se habla de cuándo fue, quiénes estuvieron al inicio. Yo sabía que esto había surgido de una conversación del Comandante en Jefe, Fidel Castro, con el compañero Volodia Teitelboim. Pero ahora se agregan otras personas, otros testimonios, y se habla también de Raúl Castro, de Manuel Piñeiro “Barba Roja”, el compañero Volodia, el compañero Rodrigo Rojas y una dirigenta de las Juventudes Comunistas.

Iván Rodríguez. Respecto de la tarea militar tengo una visión particular. Primero, que sin lugar a dudas fue un hito fundamental que nutre a la política del Partido Comunista al haber asumido esta tarea. Es un hito histórico en la historia de nuestro partido porque si bien es cierto el trabajo militar ya estaba presente, no estaba incorporado a la línea política como un referente constante, permanente. Segundo, esa decisión ayudó a instalar el trabajo militar de acuerdo a las condiciones históricas que vivíamos.

¿Hay un cambio en la estrategia del PC?

Creo que hay un reforzamiento de lo que debía ser la línea política del partido. El partido, en esos años, venía trabajando, junto con la Jota (Juventudes Comunistas) experiencias paramilitares para defensa, pero no estaba incorporado lo militar como un componente de la línea política. Era un accesorio que se ocupaba para asumir contingencias que se venían. Fue importante para desembocar en lo que será una constante en el Partido Comunista.

¿Entiendo que se trataba de formar oficiales militares profesionales? No eran cursos de guerrillas, cortos.

César Quiróz. Quiero precisar que el inicio de la tarea militar fue el 16 de abril de 1975, es decir, este 2025 se cumplen 50 años de esa tarea. Había pasado un año y medio del golpe de Estado. La primera declaración contundente del partido es el 20 de diciembre de 1973, porque tocó varios tópicos, entre ellos, el rol al que habían sido sometidas las Fuerzas Armadas por la camarilla fascista, y en esa declaración todavía se confía en la solvencia democrática de las Fuerzas Armadas (FFAA), meses después que teníamos la comprobación más clara del carácter de esas Fuerzas Armadas, y lo brutal que estaban siendo contra el pueblo. Cuba ya estaba formando médicos chilenos, estaba formando otros profesionales, entonces esto fue una reflexión de Fidel para formar gente en otra área, pensó que íbamos, en su momento, a necesitar oficiales militares profesionales para la conformación de un nuevo Ejército, de un Ejército que sustituyera al que teníamos. En todo caso, y lo digo con mucho respeto, y pensando en las circunstancias de ese año, creo que todavía no había total claridad respecto de qué se estaba construyendo. Eso lo refuerza que dos años después, en 1977, se realiza el Pleno del Comité Central, y sale un documento que se llamó “La Unidad Popular. Sus grandes logros y las causas de su derrota”, que analiza lo ocurrido, y ahí se llega a la conclusión del “vacío histórico”, que no era otra cosa que no haber tenido para la defensa del proceso revolucionario liderado por Salvador Allende y los partidos populares, una concepción que permitiera asumir la defensa de la revolución, del proceso. Por eso se plantea tener oficiales profesionales, cuadros que estudiaran tres o cuatro años en academias, que fueran cuadro militares integrales, más que militares que tuvieran alguna formación en armamento, métodos conspirativos, elementos primarios de táctica o de Inteligencia o Contrainteligencia. Era tener gente formada en el arte y la ciencia militar.

¿Una locura?

Hoy se podría pensar que era una locura, pensar en tener oficiales para un nuevo Ejército chileno. ¿Cómo hacer sentido a eso?

Iván Rodríguez. Bueno, se podría pensar eso ahora, pero lo que había, efectivamente, era la idea de reemplazar o transformar a las Fuerzas Armadas, al Ejército, después de todo lo que había ocurrido con el golpe fascista. Para eso, los comunistas pensaron en tener un contingente importante de oficiales preparados para asumir cargos de dirección.

Eso pesando en que la dictadura sería derrocada.

Claro. Se partía de esa base. Entonces tener preparado un contingente de reserva

César Quiróz. Era una idea muy visionaria, era prevenir un escenario que podría venir, pero la vida es la vida y se sucedieron otros acontecimientos y otras situaciones. Nosotros, el año 77, estábamos recién llegados a Bulgaria, conocedores de la misión que teníamos, que nos incorporábamos a esta tarea, y nos visita Rodrigo Rojas, y nos entrega un balance de lo que el partido tenía como cuadros militares formados, las especialidades, y nos habla especialmente de lo que ya pasaba en Cuba. Igual a nosotros se nos reafirma la pregunta de si había o no una concepción acabada de todo esto, o era sólo pensamiento avanzado, intuición, o parte de un proceso que no acababa y que era más global. Además, estaban las consideraciones de cómo estaba la lucha en Chile y los análisis de la derrota, de lo que se discutió en ese Pleno de 1977. Como sea, ahí Rodrigo Rojas nos dice que nosotros seríamos cuadros militares estratégicos, lo recuerdo casi literalmente, ustedes estarán formados para en el futuro contribuir a construir las nuevas Fuerzas Armadas de Chile.

En Bulgaria, en Vietnam, en Cuba

En todo esto hubo diversas experiencias personales. Incluso la formación militar incluyó a otros países. De acuerdo a lo que uno ha leído y ha investigado, hubo formación en Cuba, en Bulgaria, en Corea del Norte, en Vietnam, en la Unión Soviética, en la República Democrática Alemana. ¿Qué pueden contar de sus experiencias?

César Quiróz. Yo me formé en Bulgaria, soy del “Grupo de los Búlgaros”. Yo estaba en Moscú el año 1976, en la Escuela Superior Leninista del Konsomol (juventudes comunistas soviéticas), cursaba estudios políticos de un año, fue una extraordinaria experiencia. Un día nos visita un señor que después le llamamos el Caballero del Sombrero, el Tío Alberto, le cantábamos la canción de Serrat, y él nos embaucó en esta tarea. Conversa individualmente con cada uno y me dice que hay una propuesta del partido para usted. Me dice que el partido está preparando cuadros militares y la dirección de la Jota propuso mi nombre para que asumiera la tarea. Me indica que se trata de ir a un país que no identificó, donde ingresaríamos a una escuela militar, con mucha rudeza de vida militar, íbamos a estar enclaustrados la mayor parte del tiempo, con un régimen cerrado estudiando unos cuatro años. Me dice que va a volver en seis meses y ahí debo darle la respuesta. Yo le dije, sin asomo de suficiencia, que no era necesario que volviera, le pedí que me anotara al tiro no más. Así me embarqué en esta tarea. Después de un año estábamos llegando al lugar que no sabíamos, y recalamos en Sofía, Bulgaria, donde primero empezaría el aprendizaje del idioma búlgaro y luego íbamos a ser trasladados a otra ciudad donde estaba la famosa Escuela Militar Superior Vasil Levski, que es allá como el Manuel Rodríguez nuestro en Chile, un destacado revolucionario búlgaro. Dice el mito que en esa escuela estudió Moshé Dayán, el exministro de Defensa de Israel, antes de que se incorporara el sionismo. Yo estudié Infantería.

¿Fue más fácil la carrera militar que aprender búlgaro?

Las dos cosas fueron harto difíciles. Un dato curioso es que cuando estábamos en esa escuela había estudiantes de Yemen, que seguramente son los que les meten cañonazos ahora a los militares de Estados Unidos. Bueno, yo estuve también en Vietnam, fuimos a un curso que se llamaba Conducción Estratégica de la Guerra, que los vietnamitas se lo daban a las direcciones de partidos revolucionarios. Recuerdo que en esa experiencia estuvo el compañero Sergio Buschmann, a quien le rindo homenaje. Fue una experiencia extraordinaria, y ahí nos señalaban la concepción vietnamita de que lo militar debe ir junto con el pueblo, y nos señalaban el error nuestro de haber diseñado un aparato, una subsidiaria de la política militar. Ellos decían que el partido dirige total, directa y absolutamente la cuestión militar.

Iván Rodríguez. Yo regresé a Chile en 1983 cuando me quitaron la letra L del pasaporte. Fui a Chillán y como estaba muy vertiginoso ya tuve cargos en Ñuble, y luego llegué a la zona del carbón como encargado militar, ahí empezó mi vínculo con el quehacer militar. Después pasé a un mando central, en la Octava Región. En un momento cae parte del mando, y el compañero que me atendía, Julián Peña, me manda a buscar a Santiago y cuando llego me sugiere que vaya a un curso militar. Después de tres negativas, asumí la orden, que ya no era petición sino que una orden, y me tocó ir a Vietnam a hacer un curso de Tropas Especiales, que fue un aprendizaje hermoso y no me arrepiento de haber ido. Fue un curso de meses, fuimos varios compañeros, regresamos y me incorporé de lleno al trabajo en las Juventudes Comunistas.

Aprender vietnamita debe ser más complicado que búlgaro, y estar en Tropas Especiales vietnamitas es toda una experiencia porque ellos, a diferencia de otros, sí combatieron, y a las tropas de Estados Unidos.

No, nosotros tuvimos intérpretes, por suerte. Además fuimos por unos seis meses. Éramos un grupo cohesionado, estuvimos en un solo lugar sin posibilidad de salir, cuando mucho salíamos en grupo a dar alguna vuelta, fuimos a la Plaza de Hanoi. Fue un curso extraordinario, imagínate los instructores que tuvimos, eran oficiales de Tropas Especiales, fue una experiencia maravillosa y muy útil, fue muy intenso, aprendimos mucho.

Vínculo con el pueblo y la influencia en el FPMR y la rebelión popular

¿La tarea militar tuvo incidencia en la creación del Frente Patriótico Manuel Rodríguez y lo que vino después?

Iván Rodríguez. Así mismo, por eso te decía que fue un hito determinante e histórico cuando a la política del partido se incorporó lo militar, porque eso permitió después fácilmente hacer todo el trabajo que vino. Se incorporó el componente militar para ser parte constante de la política del Partido Comunista en esos tiempos. Mira, en los ochenta, un 80% de las bases de la Jota eran unidades de combate, un número significativo de las células del partido, llegaban al país los compañeros que tenían preparación militar completa. También acá hubo quienes nos hicimos a pulso.

César Quiróz. Diría que todo esto, en todo momento, la formación de cuadros militares profesionales, la política de sublevación nacional, el surgimiento del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, es parte integrante de lo que denominaría el llenado del vacío histórico. Te voy a decir además, que la formación de cuadros militares profesionales es un hecho inédito en la historia del movimiento revolucionario, son muy pocos los partidos que formaron, antes del triunfo, cuadros militares. Yo tengo conocimiento de que en el tiempo nuestro, lo hicieron uruguayos y argentinos y conocí a un boliviano. En el caso chileno fue el PC y socialistas, los miristas hicieron más formación paramilitar, guerrillera. Fui muy cercano a Carlos Godoy Echegoyen, joven oficial del Partido Socialista, extraordinario compañero, que muere asesinado en 1985.

¿En todo esto habrá influido las guerrillas centroamericanas que avanzaban, la Revolución Cubana era relativamente nueva, que el Partido Comunista de El Salvador se incorporara a la lucha armada, las luchas guerrilleras o militares en África?

César Quiróz. Creo que hay hechos que efectivamente influyeron, hechos mundiales, internacionales, aparte de lo que tú mencionas. No podemos perder de perspectiva lo que implicó la caída del Sha de Irán, los movimientos de liberación nacional africanos, la Caída de los Coroneles en Grecia, el triunfo de los sandinistas en Nicaragua.

Iván Rodríguez. Creo que impactó el triunfo de los vietnamitas sobre el imperialismo yaqui, que le propinaron una derrotar militar.

“Una historia digna”

Hoy el Partido Comunista está en otro período histórico, tiene otros objetivos dentro de un sistema democrático formal, vive otras realidades. ¿Esto de la tarea militar es una historia para esconder, para olvidar, o es una historia para contarla, para reivindicarla?

Iván Rodríguez. Es una historia digna. Digna de reconocerla, de contarla, de reivindicar la decisión de luchar con toda la fuerza y con todas las formas contra una dictadura que estaba ahogando, exterminando, al pueblo chileno. Lo más digno, frente a una dictadura que nos estaba masacrando, fue tomar esa decisión.

¿En algún momento tuvieron noticias de que los aparatos de Inteligencia o la CNI sabían de la tarea militar, de dónde se estaban formando, de lo que estaban planeando?

César Quiróz. Respecto de nuestra experiencia, a que no se conociera, contribuyó lo que llamaban la Cortina de Hierro…Era impenetrable, no se filtraban ciertas cosas. Ahora, hablando de anécdotas, de cosas jocosas, si se hubieran propuesto descubrirnos a nosotros, al Grupo de los Búlgaros, quizá lo habrían hecho con mucha facilidad, porque cometimos muchos errores. Mira, nosotros en Bulgaria éramos cubanos, era nuestra chapa, éramos supuestamente unos 30 cubanos donde no había un solo negro, éramos cubanos que cantábamos música altiplánica, tocábamos charangos y quenas, y más de alguno se fue de boca, en las sábanas ardientes soltó más de lo que tenía que decir. Creo que nunca siguieron un hilo.

¿La tarea militar fue algo más que una tarea militar?

Iván Rodríguez. Fue más que lo militar, hubo una formación integral, hubo trabajo político, trabajo intelectual, trabajo de vinculación social, de construcción de partido. Hubo un trabajo intelectual de construir la política de Rebelión Popular de Masas, fue algo que lo asumió el partido en su conjunto, es una diferencia con los partidos que no tenían a las masas como actores determinantes.

César Quiróz. Hay un aspecto que me gustaría resaltar. El internacionalismo de los comunistas, que es una consecuencia de la tarea militar. Nuestros compañeros combatieron y algunos cayeron en Nicaragua y en El Salvador. Hay una historia de latinoamericanismo desde Chile, como en la guerra de independencia en Cuba donde a lo menos 18 chilenos participaron, en su mayoría eran balmacedistas, de internacionalismo como en la Guerra Civil española, ahí participaron al menos 61 chilenos y muchos eran exmilitares. El internacionalismo comunista es una página inmaculada del Partido Comunista de Chile. Están los compañeros que participaron del triunfo de la Revolución Sandinista, los que después juegan un papel muy importante en la construcción del Ejército Popular Sandinista, están los que van a una segunda etapa que fue la lucha contra las bandas somocistas, y bueno, están los que combatieron en El Salvador. Creo que la historia del internacionalismo de los comunistas no está escrita todavía y fundamentalmente los jóvenes, y en primer lugar los jotosos, la Jota, deben conocer y deben rescatar, reivindicar, como parte de la historia del Partido Comunista y de la tarea militar de los comunistas que en estos días cumplió 50 años.

Iván Rodríguez. La tarea fue el puntapié inicial de todo lo que se desarrolló posteriormente en la lucha contra la dictadura y hacer frente a la masacre con ejecutados y detenidos desaparecidos. Me parece que hay que hacer un reconocimiento a las direcciones interiores del partido que asumieron con mucha fuerza el impulso y la conducción, fueron muy valientes y jugaron un papel fundamental. Tengo claro que sin política popular de masas, sin trabajo de sublevación, la posibilidad de haber terminado con la dictadura no habría existido.