El equipo constitucional del Partido Comunista de Chile mediante un comunicado indicó que la nueva Carta Magna debe ser para Chile y sus trabajadores/as y no para retroceder en derechos democráticos. Y recalcó que si se escribe a la medida de la derecha “todo seguirá igual o peor, arriesgando que el proceso fracase por su responsabilidad”.
Santiago. 21/07/2023. Declaración completa del Equipo Constitucional del Partido Comunista:
Como Partido hemos valorado el Anteproyecto de la Comisión Experta como un piso mínimo, porque a pesar de sus insuficiencias, consagra el Estado Social y Democrático de Derecho de una manera que habilita y hace posible responder a las demandas sociales largamente esperadas por Chile a través de las mayorías democráticas: Trabajo decente y libertad sindical, derecho a la salud, derecho a la seguridad social, a la vivienda y derecho al agua.
Un texto constitucional debe ser un pacto en donde todas las visiones democráticas de un país puedan verse contempladas. En cambio, hoy la Derecha aprovecha una mayoría circunstancial para redactar una Constitución de Derecha. La ley fundamental de un país no puede ser un traje a la medida de un sector. Y, bajo ninguna circunstancia, ser un texto regresivo respecto de los derechos sociales y de los avances civilizatorios que tantos sacrificios le han costado al pueblo de Chile.
En materia de derechos de trabajadores y trabajadoras, se busca retroceder a la redacción de la Constitución impuesta por la dictadura, e incluso ir más allá, limitando constitucionalmente la huelga a la negociación colectiva. El Partido Comunista de Chile no aceptará retrocesos en los derechos laborales.
En cuanto a salud, se propone una redacción que constitucionaliza el modelo de las ISAPRES, prácticamente asegurando un perdonazo o un rescate estatal a quienes han lucrado con la salud del pueblo de Chile. Algo similar ocurre con las AFP, asegurando que todo siga igual en materia de pensiones. La derecha no busca garantizar derechos, sino asegurar buenos negocios para quienes han lucrado y abusado de las necesidades de todos los chilenos y chilenas.
En materia de Tratados Internacionales de Derechos Humanos, se pretende desconocer su rango constitucional para asegurar que los derechos puedan seguir siendo mercantilizados. Además, se busca la impunidad de los peores criminales que ha conocido el país, beneficiando, entre otros, a Miguel Krassnoff, amigo personal de su líder José Antonio Kast.
Una vez más la Derecha conservadora amenaza los derechos de las mujeres, entre otras cosas, haciendo inconstitucional el aborto en 3 causales. Con ello buscan imponer su visión conservadora a todo Chile.
A nivel político, pretenden disminuir la representación popular, asegurándose más cupos en el Congreso Nacional. Al mismo tiempo, proponen que el nuevo texto sea prácticamente imposible de ser modificado. Junto con dejar sin efecto la paridad en el sistema político.
En resumen, con una Constitución a la medida de la Derecha, todo seguirá igual o peor, arriesgando que el proceso fracase por su responsabilidad.
Seguiremos luchando por una Constitución democrática que, 50 años después del Golpe civil – militar, deje atrás el legado de Pinochet. Con ese fin, defenderemos nuestras ideas, buscando impedir cualquier retroceso, para contribuir a una Constitución democrática para todos los chilenos y chilenas.