El término de un año de trabajo arduo y complejo que se materializó en el texto de una nueva Constitución, producto de un inédito proceso constituyente marcado por decisiones de democráticos del pueblo chileno. Otro hito se marcará con el plebiscito del 4 de septiembre, donde nuevamente será la ciudadanía mediante el voto obligatorio la que decidirá si esta propuesta se aprueba o rechaza.
Daniela Pizarro Amaya. Periodista. 05/07/2022. Después de un año de intenso trabajo, la Convención Constitucional entregó la propuesta de nueva Constitución al Presidente de la República, Gabriel Boric, y al país entero, en una ceremonia que superó con creces la inauguración de la misma. Con la entonación del Himno Nacional en dos oportunidades, en primera instancia a cargo de la Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles y al término dirigida por el destacado pianista Valentín Trujillo, se dejó satisfechos a los sectores conservadores de la Convención que en reiteradas ocasiones criticaron la falta de emblemas patrios en las ceremonias (banderas, himno).
Desde las ocho de la mañana comenzaron a llegar los y las convencionales a la sede del Congreso en Santiago. Representantes de los escaños reservados con sus atuendos originarios arribaron después de realizar una rogativa “Por un Chile intercultural y plurinacional” en el Cerro Santa Lucía o Cerro Huelén.
La actividad realizada en el Salón de Honor del Congreso Nacional en Santiago, partió treinta minutos después de lo programado, a eso de las 10:30, y destacó por su sencillez, simbolismo y emoción en una mañana soleada pero de baja temperatura.
Contó con la presencia de representantes de los poderes del Estado y con invitados e invitadas repartidos en una carpa instalada a la salida del Salón y en el Hemiciclo al interior donde estaban principalmente los asesores y asesoras de los y las convencionales. Todos los invitados/as recibieron una edición de la flamante nueva Constitución y un lápiz para recolectar firmas y dedicatorias.
Los discursos de la Mesa Directiva fueron abiertos por el vicepresidente Gaspar Domínguez, quien en emotivas palabras repasó lo que fue la instancia constituyente a lo largo del año, recalcando la valoración que hace el texto a las diferencias que por años fueron invisibilizadas. Al mismo tiempo se refirió de manera indirecta a la insistencia de los conservadores por levantar falsas polémicas respecto a los símbolos patrios, que hasta último momento trataron de instalar.
“Amar la patria es mucho más que los emblemas, es amar y respetar a las personas que la componen. Y este amor es darle al pueblo la soberanía de escribir sus propias reglas, el poder de definir su futuro. Escribir una Constitución democrática que fortalezca la protección de los derechos es un profundo acto de patriotismo”, señaló Domínguez.
Asimismo, la presidenta de la Convención, María Elisa Quinteros, en su discurso de cierre sintetizó el trabajo constituyente. “No inventamos la realidad ni impusimos demandas, nos limitamos estrictamente al mandato histórico y ciudadano, con acuerdo amplios, con pleno respeto y consideración al marco jurídico internacional y con fundamento científico, ético y social en cada propuesta. Desde ese piso sólido soñamos y construimos”.
Quien también presidió la Convención Constitucional, en su primera parte, fue la convencional de escaños reservados por el pueblo mapuche, Elisa Loncón, un hecho que llenó de simbolismos la apertura de este espacio. Es por eso que en declaraciones a la prensa abordó el carácter histórico de la jornada. Indicó que “lo que hicimos los convencionales fue construir un relato común” y agregó que “por primera vez en este edificio estuvimos las regiones, las mujeres y los pueblos entregando al Presidente esta nueva Constitución. Eso nos hace un país digno de todos sus pueblo”.
La caracterización de la jornada y de todo el proceso constituyente estuvo marcada por ser un hito. Por primera vez la ciudadanía decidió vía votación popular la necesidad de redactar una nueva Constitución a través de una Convención Constitucional con representantes que también fueron elegidos democráticamente. Una vez iniciado el proceso previo a una serie de cabildos y encuentros constituyentes, se abrió la presentación de iniciativas populares de norma, es decir, donde las personas comunes y organizaciones sociales ingresaron sus propuestas, las cuales fueron discutidas y votadas por los y las convencionales.
Tan transparente fue el proceso que cada una de las sesiones de Comisiones y de Plenos fueron transmitidas por las redes sociales de la Convención, en Youtube, Facebook, Twitter e Instagram. Y algunas transmitidas por la señal del Canal de la Universidad de Chile. Todas las discusiones y votaciones seguirán publicadas en el Portal Web para su revisión infinita.
Otro hito se marcará con el plebiscito del 4 de septiembre, donde nuevamente será la ciudadanía mediante el voto obligatorio la que decidirá si esta propuesta se aprueba o rechaza. De ser aprobada, la propuesta constitucional contiene una serie de normas transitorias que determinan cómo será la paulatina aplicación de la nueva institucionalidad. Y de ser rechazada, será la misma Constitución de la dictadura la que seguirá primando.
Tras la ceremonia el convencional del Partido Comunista (PC), Hugo Gutiérrez, manifestó que “hoy el pueblo de Chile volvió a reencantarse y reencontrarse con el proceso constituyente. Hoy se inicia el fin de la mentada y nunca acabada transición democrática”.
En tanto, el convencional Jorge Baradit, apuntó que “costó mucho, pero hoy día tenemos esta preciosa Constitución, más humana, solidaria y que abre un mejor futuro para nuestro país”.
En la misma línea, la convencional del PC, Ericka Portilla, aseguró que “este proceso histórico lleno de simbolismos nos deja una propuesta constituyente honesta y sensible, que recoge las demandas ciudadanas y el fin de los abusos que estallaron el 18 de octubre”.
Mientras la convencional, Giovanna Grandón, conocida como “Tía Pikachu”, subrayó que “siento una profunda emoción por este día histórico para Chile. Una verdadera celebración para nuestra democracia. El trabajo para las grandes transformaciones sociales recién comienza”.
Después de la ceremonia, además, las y los convencionales se despidieron de los funcionarios y funcionarias que acompañaron el trabajo y quienes deberán laborar todo el mes de agosto para terminar de cerrar el proceso en sus aristas administrativas. También agradecieron a los trabajadores y trabajadoras de la prensa que estuvieron desde el primer día instalados en el interior de la Convención.
Foto: Carlos Espinoza. Agenda de Prensa.