Nuevo estudio de la Fundación Sol apuntó que “en 2020 se jubilaron 102 mil personas y el 50 % de ellas pudo autofinanciar una pensión menor a $75 mil”. Un alto porcentaje tiene unos 10 millones de saldo en su cuenta individual y eso implica una paupérrima jubilación. “Teniendo en cuenta que el 78% de los hombres y el 89% de las mujeres afiliadas con edad cercana a la legal de jubilación acumulan menos de $50 millones en su cuenta individual y que este monto (cota máxima) sólo permite construir una pensión autofinanciada de alrededor de $235 mil para los hombres y de $210 mil para las mujeres”, estableció el análisis realizado por Francisca Barriga y Marco Kremerman.
Equipo “El Siglo”. Santiago. 03/08/2021. Continúan los estudios que revelan el desastroso estado de las pensiones en Chile bajo la hegemonía de un sistema privado dominado por grandes consorcios financieros nacionales e internacionales que manejan las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP).
Nuevamente la Fundación Sol dio a conocer un análisis en relación a las jubilaciones que muestra una situación catastrófica para la inmensa mayoría de trabajadores que entran a la edad de retiro. Análisis realizado por Francisca Barriga y Marco Kremerman, bajo el título de “Pensiones sin seguridad social: ¿Cómo se calcula el monto de las pensiones en Chile?”.
Los siguientes son párrafos destacados del resumen ejecutivo del documento:
“A 40 años de su instauración, los resultados del sistema de pensiones en Chile son catastróficos: en 2020 se jubilaron 102 mil personas y el 50 % de ellas pudo autofinanciar una pensión menor a $75 mil, e incluso la mitad de aquellas personas que cotizaron entre 30 y 35 años, es decir, la mayor parte de su vida laboral, pudo autofinanciar una pensión menor a $287 mil, lo que equivale al 85 % del Salario Mínimo Vigente”.
“En un sistema de contribución definida administrada bajo la lógica de capitalización individual, se sabe exactamente cuánto hay que cotizar mes a mes pero no existe un beneficio definido (tasa de reemplazo) que dependa directamente de los a ̃nos cotizados y la remuneración imponible promedio. Por lo tanto, se instala una incertidumbre respecto a la forma en cómo se determina el monto final de una pensión, dependiendo ésta de muchos factores, que en la mayoría de los casos son de difícil comprensión para una persona que se encuentra cerca de jubilar o está jubilada”.
“Al analizar los saldos de cuentas individuales de las personas afiliadas que se encuentran cercanas a cumplir la edad de jubilación, se observa que, en el caso de los hombres entre 60 y 65 años, el 31,3 % actualmente registra menos de $10 millones, y prácticamente 8 de cada 10 de ellos tiene menos de $50 millones. Sólo un 9,9 % presenta un saldo superior a $100 millones. En el caso de las mujeres afiliadas entre 55 y 60 años, el panorama es aún más complejo: el 56,7 % registra menos de $10 millones, y 9 de cada 10 mujeres tiene menos de $50 millones. A diferencia de los hombres, sólo el 2,8 % de ellas acumula más de $100 millones”.
“Un caso representativo de un hombre de 65 años con cónyuge tres años menor, que acumuló $10 millones al momento de jubilar, logra autofinanciar una primera pensión por Retiro Programado (RP) de $49.887, la cual se va reduciendo en el tiempo, y una pensión por Renta Vitalicia (RV) pagada por una Compañía de Seguros de $45.380. Si ese mismo hombre acumula $50 millones, podría construir una primera pensión por RP de $249.436 y una pensión por RV de $226.901. Un saldo de $80 millones a ́un no permite superar los $400 mil en modalidad de RP y solo se ubica levemente por sobre el monto del Salario Mínimo en el caso de la RV”.
“Un caso representativo de una mujer de 60 años con cónyuge tres años mayor, que acumuló $10 millones al momento de jubilar, logra autofinanciar una primera pensión por RP de $43.924, y una pensión por RV de $39.408. Si esa misma mujer acumula $50 millones, podrá recibir una primera pensión por RP de $219.622, y una pensión por RV de $197.041. Un saldo de $100 millones aún no permite superar los $450 mil en modalidad RP y los $400 mil en el caso de la RV”.
“En abril de 2021, la remuneración imponible promedio de los cotizantes fue de $905 mil, por lo que una tasa de reemplazo en torno al 70 % para el sistema, significa una pensión promedio de $650 mil. ¿Qué saldo deberían tener actualmente las personas afiliadas en su cuenta individual al momento de jubilar para alcanzar ese monto? Un hombre que jubile a los 65 años y se acoja a la modalidad de RP debería acumular un saldo entre $112 y $130 millones, dependiendo de su estado civil y la edad de su cónyuge. Para una mujer de 60 años que se acoja a la modalidad de RP es aún más difícil de alcanzar, debiendo acumular un saldo entre $144 y $148 millones, dependiendo de su estado civil y edad de su cónyuge. Al consolidar la situación de hombres y mujeres, se estima que menos de un 5 % de las personas afiliadas que se jubilarán en el corto plazo podría obtener una pensión superior a los $650 mil, evidenciando la profunda crisis previsional que derivó del actual sistema”.
“En síntesis, teniendo en cuenta que el 78% de los hombres y el 89% de las mujeres afiliadas con edad cercana a la legal de jubilación acumulan menos de $50 millones en su cuenta individual y que este monto (cota máxima) sólo permite construir una pensión autofinanciada de alrededor de $235 mil para los hombres y de $210 mil para las mujeres, el panorama presente y futuro para las personas jubiladas en Chile es desolador y no es sostenible ni financiera ni socialmente para la reproducción de la vida”.
“Cuando José Piñera, Ministro del Trabajo y Previsión Social durante la Dictadura militar, expone ante los generales de las Fuerzas Armadas y de orden los argumentos para convencerlos de la necesidad de llevar a cabo una reforma estructural, asegura que, a través de las cuentas individuales administradas por las AFP, las personas que coticen regularmente podrán alcanzar una pensión equivalente al 70% o al 80% de su último salario”.