REPORTAJE. “#NoTenemosMinistra”, un hecho en este gobierno

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Segundo bochornoso cambio en MinMujeryEG, todos de la UDI. Los factores detrás de erráticas gestiones. Que “el gobierno deje de experimentar” con este Ministerio, sostuvo Camila Vallejo.

Gonzalo Magueda. Periodista. 09/06/2020. Es un secreto a voces que nunca en La Moneda, desde que asumió la presidencia Sebastián Piñera, fue una prioridad y una real preocupación designar a una persona de alta capacidad profesional y de posicionamiento político en el puesto de ministra de la Mujer y la Equidad de Género (MinMujeryEG). Algunos lo asocian a una desprolijidad, otros a una concepción restrictiva de derechos de las mujeres.

Como sea, la conducción de esa cartera resultó un desastre y esta semana se produjo un tercer relevo en el cargo de ministra, en medio de otra situación bochornosa.

En la línea de lo que sería la intencionalidad del gobierno piñerista, las tres designaciones que van, son de militantes de la Unión Demócrata Independiente (UDI), la colectividad más conservadora y restrictiva en temas de derechos de las mujeres. Y militantes de segunda línea. Además, con cuestionamientos desde la misma derecha, donde algunos sectores siempre pidieron que esa cartera estuviera, al menos, en manos de personeras más liberales.

Tanto  Isabel Plá, la primera en ocupar el cargo, como Santelices, fueron objetadas por su falta de capacidad técnica, su limitada solidez política y una excesiva dependencia de lo que saliera de las oficinas de La Moneda en la gestión del Ministerio. De hecho, Plá venía del equipo de Piñera en “Avanza Chile” y su designación, en su momento, causó sorpresa y algunas molestias en partidos de la derecha. Santelices fue alcaldesa en Olmúe, promovida por “Los Coroneles” de la UDI, y también provocó cierta reticencia en el oficialismo por lo que serían sus inhabilidades para el puesto. Ahora con Mónica Zalaquett se vuelve a repetir la designación de alguien con ADN ultraconservador, y que estaría muy atada a órdenes o disposiciones que vengan desde palacio, particularmente de su colega de partido, el UDI Cristian Larroulet a quien, por lo demás, se atribuye las reales decisiones en materia de políticas del Ministerio de la Mujer.

Existe la convicción en el mundo del movimiento feminista y expertas vinculadas al tema, que junto al cuoteo político de asignarle el MinMujeryEG a la UDI, hay una decisión de Piñera de colocar en el cargo a quienes congelen, frenen, desvirtúen y no desarrollen las iniciativas progresistas y de avanzada que se venían materializando desde la creación del Ministerio en el gobierno de Michelle Bachelet. Por cierto, una gestión que incluyó materializar medidas tan contundentes como la ley de interrupción del embarazo en tres causales, y que siempre estuvo a cargo de la ministra Claudia Pascual, del Partido Comunista, que a diferencia de lo que ocurre ahora con sus sucesoras, se mantuvo los cuatro años de gobierno consolidada en el cargo. Se señala que la sola existencia del MinMujeryEG molesta en La Moneda.

Pero además del tema deficitario en políticas públicas para las mujeres, las ministras de la Mujer colocadas por Piñera, presentaron situaciones críticas y que terminaron, en gran medida, costándoles sus cargos.

El silencio de Plá

Como el silencio de Isabel Plá ante la masiva violación de derechos humanos, abusos y maltratos que se cometieron contra un par de miles de mujeres, de todas las edades y en casi todo el país, en el contexto del estallido social el año pasado. Hay que recordar el episodio en que unas carabineras resultaron lesionadas, y ella salió prontamente a condenar el hecho y apoyar a las uniformadas, al parecer por indicaciones de La Moneda. Cuando no había dicho nada respecto a mujeres abusadas, mutiladas en sus ojos, golpeadas y maltratadas por Carabineros.

Además, su poca fuerza en persistir en el trámite de leyes referidas a pos natal, lactancia materna, acoso callejero, profundizar en tipificación más amplia de los casos de femicidios. Plá, inclusive, se atrevió a criticar el llamado a movilizarse el 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer,  y dijo que el movimiento tenía “una agenda que excede los temas de la mujer”.

Santelices fue juzgada por lo que hizo

En el caso de Macarena Santelices, estuvieron las denuncias por no defender ni atender las denuncias de maltrato a mujeres en la Municipalidad de Olmué cuando ella era alcaldesa, su defensa acérrima de “la obra” de la dictadura y unas afirmaciones relativizando las violaciones a los derechos humanos. Ante eso, cuando asumió como Ministra, pidió: “Juzguenme desde lo que haga de hoy en adelante”. Eso se hizo durante el escaso mes que duró en el cargo, y tuvo que renunciar.

En sus primeras semanas, desde la oposición y organizaciones de mujeres, se le cuestionó el atraso y poca proactividad en protección de mujeres víctimas de violencia en cuarentena, el no habilitar albergues para recibirlas y casi nula gestión en el Parlamento. Luego salió el video, en el marco de la campaña “Cuentas Conmigo” -que supuestamente era para incentivar la lucha en contra de la violencia hacia las mujeres- con un adulto mayor pidiendo perdón por haber sido un agresor de su pareja, queriendo empatizar con su nieta, en definitiva, victimizándose al abusador. El material tuvo que ser retirado y provocó la molestia en La Moneda.

No pasaron ni dos semanas, y Santelices se anotó otro error no forzado, y nombró al ex editor de La Cuarta a cargo de materiales sexistas y ex productor del “piscinazo” del Festival de Viña del Mar, como Jefe de la División de Estudios del MinMujeryEG. Era el peor contrasentido en una designación al interior de la cartera. Ya estaba en marcha en masivo cuestionamiento al nombramiento y a la gestión de Santelices. Eso terminó de molestar a algunos en La Moneda; de ahí que exista la versión de que la renuncia de Macarena Santelices fue inducida desde el equipo presidencial y que cuando ella hizo saber de su dimisión, Mónica Zalaquett ya estaba nombrada.

Zalaquett, la restrictiva

Por cierto, Zalaquett parte con cuestionamientos, al igual como partió Santelices. Es una mujer ultraconservadora, defensora del régimen militar y también está vinculada a “Los Coroneles” de la UDI, específicamente a Pablo Longueira.

Trabajó en varias empresas privadas, mantuvo vínculos más que familiares con su hermano el también UDI, Pablo Zalaquett, investigado y procesado por irregularidades, como el caso “Tragamonedas”.

Ella, como parlamentaria, siempre se opuso al pos natal de seis meses, a toda posibilidad de interrupción del embarazo y a derechos de la diversidad sexual. Promovió que niñas violadas y embarazadas no pudieran abortar, lanzó frases como “no quiero que en Chile pase lo que sucede en Europa” y afirmó que es “una guillotina laboral” el pos natal.

Zalaquett personifica a las mujeres ultraconservadoras y es una de las dirigentas más tradicionales en la gestión conservadora de la UDI.

Cuoteo e intermitencia

De “Renuncia Plá” se saltó al “# NoTenemosMinistra” de Santelices.  Habrá que esperar qué ocurrirá con los cuestionamientos a Zalaquett en la cartera. Mientras tanto, los 22 puntos de la Agenda Mujer del programa de Sebastián Piñera están a menos de media marcha y hay inmensas dudas respecto a cómo se seguirá comportando el MinMujeryEG frente a las graves situaciones de las mujeres en medio de la pandemia y las cuarentenas, proyectos como el pos natal, extensión de casas de acogida y de protección, reacción ante las denuncias diarias de violencia contra mujeres y otras materias que siguen postergadas.

De alguna manera lo sintetizó una parlamentaria de la derecha. Marcela Sabat, diputada de Renovación Nacional, declaró a la prensa que lamentaba “lo que está ocurriendo en este periodo de crisis con el Ministerio de la Mujer, las únicas que pierden con esta intermitencia en el cargo son las mujeres de Chile que se han visto mayormente vulneradas con esta pandemia. Hoy más que nunca necesitamos una gestión eficiente, políticas públicas con perspectiva de género y respuestas concretas a las problemáticas de hoy, espero que haya un nombramiento seguro comprometido y con decisión lo antes posible”.

En todo caso, la legisladora del Partido Socialista, Maya Fernández, puntualizó que  “lo ocurrido ha sido previsible desde el día uno, porque el Presidente (Sebastián Piñera) nombró una ministra que tenía que ver más con un cuoteo político que con su experiencia o con impulsar una agenda de género”.

En tanto, Camila Vallejo, diputada del Partido Comunista, sostuvo que “necesitamos que el gobierno deje de experimentar con el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género y asuma con sentido de responsabilidad y seriedad la conducción de esta cartera tan importante para las mujeres de nuestro país. Llevamos nueve meses con una situación crítica en el Ministerio de la Mujer, lo que es sumamente grave”.

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