Iniciaron las sesiones del Encuentro Antimperialista de Solidaridad, por la Democracia y contra el Neoliberalismo en el Palacio de las Convenciones de La Habana, con la presencia de más de 1200 delegados de 500 países.
Nuria Barbosa León. Granma. 02/11/2019. Con un despertar martiano por parte de los niños de La Colmenita, iniciaron las sesiones del Encuentro Antimperialista de Solidaridad, por la Democracia y contra el Neoliberalismo en el Palacio de las Convenciones de La Habana con la presencia de más de 1200 delegados de 500 países, quienes alzarán sus voces unidas en contra del hegemonismo imperial del siglo XXI.
Asistieron a la sesión inaugural José Ramón Machado Ventura, Segundo Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), Esteban Lazo Hernández, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y del Consejo de Estado, Ulises Guilarte de Nacimiento, miembro del Buró Político del PCC y Secretario General de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC). También estuvo presente Ralf Gonzalvez, presidente de San Vicente y las Granadinas, Salvador Sánchez Cerén expresidente de El Salvador y otros líderes de movimientos sociales, organizaciones políticas y representantes de la intelectualidad y la cultura.
Una conferencia magistral del canciller cubano Bruno Rodríguez describió los escenarios para desarrollar la lucha actual, donde la hegemonía del imperialismo y el avance de las corrientes de derecha pone en peligro la paz mundial, hace crecer las desigualdades y la injusticia, lo cual genera una creciente ola de descontento popular y una mayor radicalización de las rebeldías.
Acusó al gobierno de Donald Trump por la injerencia en los asuntos internos de nuestros países y señaló que el capitalismo es inviable e insostenible, porque provoca el exterminio de la especie humana y el agotamiento de los recursos naturales: «No habrá desarrollo sostenible sin desarrollo del sur», puntualizó.
Nombró al internet como el más desventajoso campo de batalla por el uso malintencionado de la intermedia, causante de la derrota electoral de los candidatos, representantes de la izquierda por lo cual constituye hoy un reto: «concentrar la lucha dentro del ciberespacio o en las calles».
«Siento el deber de expresarle que vienen tiempos difíciles en que los esfuerzos de todos serán decisivos y determinantes», aseguró el ministro de relaciones exteriores de Cuba y añadió que existen más medidas criminales y específicas, no convencionales y nuevas, que impiden el comercio normal de la Mayor de las Antillas, pero no pueden subestimar la resistencia de nuestro pueblo, unido al Partido, seguidor del legado de Fidel Castro y con capacidad para articularse.
Reconoció que Cuba jamás traicionará sus principios y acompañará a Venezuela con su Revolución Bolivariana, al estado plurinacional de Bolivia, al sandinismo de Nicaragua. Clamará porque se cumplan los acuerdos de paz en Colombia, apoyará las manifestaciones en las calles ejemplificadas por los pueblos de Ecuador, Chile y Haití. También exigió la libertad del expresidente brasileño Luis Inacio Lula da Silva, la descolonización de Puerto Rico y la soberanía para los pueblos de palestina y saharaui.
Las palabras de bienvenida estuvieron a cargo de Fernando Glez Llort, presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), quien funge también como miembro del comité organizador del evento junto al Capítulo Cubano de los Movimientos Sociales, que dirige la CTC. Dedicó sus palabras a Fidel Castro Ruz, líder histórico de la Revolución y cuyos conceptos y ejemplo personal constituyen la guía en el camino seguro hacia la victoria.
Aseguró que a esta Isla caribeña nunca se le podrá vencer porque predomina el amor por encima de cualquier sacrificio, describió el momento como un escenario desafiante por lo cual exhortó a lograr la más amplia y urgente movilización posible de las fuerzas organizadas en la lucha contra las corrientes neoliberales y de derecha.
«Ninguna mejor tribuna para ratificar que Cuba no renunciará ni traicionará a la solidaridad con los demás pueblos del mundo», aseveró el presidente del ICAP y convocó a los presentes a acompañar al pueblo a enfrentar el criminal bloqueo económico, comercial y financiero que por más de 60 años ha mantenido las sucesivas administraciones de la Casa Blanca, hoy recrudecida por la activación del título III de la ley Helms Burton, lo cual representa más sanciones para derrocar la Revolución.
«Continuaremos convocando a todas las fuerzas políticas honestas del planeta a condenar la criminalización de las luchas, la judicialización de la política, el asesinato de líderes sociales, prácticas que pretenden negar el sentido de justicia de las rebeldías populares», advirtió González Llort y pidió también contribuir con el conocimiento y las experiencias acumuladas en los procesos de lucha a consolidar una conciencia colectiva en la necesidad de avanzar en la construcción de la más amplia unidad.
Sentenció: «Haremos todo lo posible para garantizar que este Encuentro permita a las fuerzas que en él participan, reflexionar de forma serena y constructiva sobre cómo alcanzar el objetivo estratégico común de retomar la iniciativa política» porque la victoria pertenece a quienes resisten y combaten.