Jacqueline van Rysselberghe dijo que su gobierno se pone “de rodillas ante los comunistas” frente a posicionamiento de iniciativa de Camila Vallejo.
Equipo ES. 11/08/2019. A 48 horas que el Presidente Sebastián Piñera y el ministro del Trabajo y Previsión Social, Nicolás Monckeberg, anunciaran medidas para encarar el proyecto de reducción de la jornada laboral semanal de 45 a 40 horas, promovido por Camila Vallejo, diputada del Partido Comunista (PC), en lo que parlamentarios calificaron como actitudes “desesperadas” las del gobierno, la presidenta de la Unión Demócrata Independiente (UDI), Jacqueline van Rysselberghe, también reaccionó con desesperación y enojo y declaró a la prensa que “no veo por qué el gobierno tiene que ponerse de rodillas ante los comunistas”.
Eso, porque desde La Moneda y del Ministerio del Trabajo comenzaron a modificar su iniciativa de “adaptabilidad” y “flexibilidad” laboral, e inclusive introdujeron una idea de 41 horas laborales “promedio” a la semana, ante el posicionamiento del proyecto de 40 horas que presentó hace dos años la Bancada Parlamentaria del PC.
La presidenta de la UDI le enrostró al Ministro Monckeberg que “ha sido lento en esto y ha defendido poco”, cuando más del 70% de la ciudadanía está apoyando las 40Horas y varios expertos apuntan a que es una medida que contribuye a garantizar derechos y mejorar la calidad de vida de los trabajadores.
En medios de prensa se dijo a finales de la semana que Camila Vallejo, entre otras cosas, le ganó “la batalla comunicacional” al gobierno en este tema. Van Rysselberghe, de hecho, sostuvo en un programa televisivo que “hubo falencias comunicaciones” de parte del Ejecutivo en esta materia y que se debió impulsar con más fuerza la tesis de “flexibilidad laboral” que está encontrando muchos detractores en el mundo laboral y a nivel parlamentario.
Las declaraciones de la dirigenta de derecha se dan cuando de manera transversal, diputadas y diputado desde la Democracia Cristiana hasta el Frente Amplio, incluyendo algunos de Renovación Nacional (RN) están respaldando la iniciativa de los comunistas de bajar a 40 horas la jornada semanal de los asalariados.